¿QUÉ PUEDO HACER?

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Sonó el chirrido de la puerta.

-¡Oh no! Ya vienen a por mi...- dije en un susurro.

La puerta se abrió lentamente. Me sequé las lágrimas y me encogí en el fondo del armario. Tenía miedo, mucho miedo, ahora Shawn no me podría proteger, estaba solo... Se oyen pasos registrando la habitación y cada vez se acercan más. Quien quiera que fuese el que estaba al otro lado de la puerta gruñó, cogió el pomo de la puerta y la abrió. Y... Era Shawn menos mal, suspiré aliviado... No espera, ese no era Shawn, tenía su cuerpo pero no era él. El terror volvió a mi, no sabía qué hacer, conocía a Shawn pero a ese no. Era muy distinto. Me miraba con maldad, su respiración era agitada y en su cara se dibujaba una sonrisa maligna y espeluznante. Se acercó lentamente a mi, se agachó y me olisqueó unos segundos. Después soltó un aullido y acercó las garras de su mano derecha a mi mejilla. Fue raro pero en ese momento no sentía miedo, Shawn me prometió que no me haría daño y yo confío en él, asi que respiré hondo, cerré los ojos y dejé que la suerte decidiera mi destino. Apoyó sus garras en mi mejilla y me la acarició con brusquedad para después hacerme un corte. Noté que la sangre bajaba, iba a arañarme otra vez así que cerré los ojos, pero no pasó nada, abrí un ojo y después el otro, Shawn se separó rápidamente de mi y soltó un largo aullido que terminó en un grito. Volvió a su forma normal, siendo ese chico que tanto adoro. Su respiración era acelerada. Me acerqué a él y le ayudé a levantarse.

-Shawn... ¿Estás bien?- pregunté preocupado.

- Shawn me miró y sonrió -Si... Pero un poco cansado- me miró la mejilla y se tapó la boca con las manos -A-axel... ¿Yo e echo esto?- cayeron lágrimas de sus ojos -Lo-lo siento mucho Axel, yo no quería y-yo...

- le abracé -Shhh... Tranquilo Shawn no pasa nada a sido sin querer- le di un beso en la frente pero ¿¡por qué hice eso!? Va a pensar que siento algo y seguro que a él no le gustan los hombres. Espero que no se aleje de mi...

Estuvimos abrazados durante unos minutos, necesitaba recuperarme del miedo que sentí hace un rato.

-Axel- me llamó separándose de mi -El avión saldrá dentro de poco, deberíamos irnos. Pero antes...

Me empujó tirándome a la cama. Se acercó y se puso encima mía, me miró a los ojos y después olisqueó todo mi cuerpo. En ese momento me sentí muy raro y mis mejillas empezaron a arder, espero que no lo haya notado... Puso sus manos en mi abdomen para después bajar la cremallera de mi chaqueta y las pasó por debajo de mi camisa. Movió las manos de un lado a otro pasando por todas partes de mi abdomen hasta que paró en mi costado izquierdo, agarró algo que tenía clavado pero no me había dado cuenta de que lo tenía hasta ahora. Usó toda su fuerza, me lo quitó y se separó de mí.

-Ya no nos podrán encontrar- aseguró mientras yo seguía en la cama asimilando lo que acababa de ocurrir -Será mejor que nos vayamos.

Asentí algo confuso. Salimos de la habitación y nos encontramos con los cuerpos de los hombres de negro.

-¿E-están muertos?- pregunté asustado.

-Tranquilo sólo están inconscientes. Es mas...- cogió el objeto que hace un rato tenía pegado al cuerpo y se lo colocó a uno de los hombres. Cogió un aparato que este tenía en el bolsillo -Con esto podremos saber donde se encuentra su jefe, y todo gracias a ti- me miró y sonrió. Adoro esa sonrisa, casi tanto como la de Julia.

-Será mejor que nos vayamos podrían despertarse en cualquier momento. ¡Vamos!- Me cogió de la muñeca y hechó a correr. Iba muy rápido casi no podía apoyar mis pies en el suelo, debe de estar acostumbrado al huir de esos hombres.

Bajamos las escaleras y salimos del edificio, se paró un momento en la puerta para pensar como ir al aeropuerto y siguió corriendo. Giramos en una esquina, cruzamos la calle y entramos en un callejón sin salida. Cuando Shawn se dio cuenta paró de golpe y yo, de la velocidad a la que iba, me caí al suelo y tiré también a Shawn quien, no se sabe como, cayó encima mío. Sentía su respiración, estaba tan cerca, nuestros labios estaban a escasos centímetros y nuestros ojos se encontraron. Era genial, fue la primera vez que me perdí profundamente en su mirada. Quería besarlo, es mas necesitaba besarlo, algo que me demostrara que le quería de verdad o que solo era una ilusión. No podía mas, había esperado demasiado tiempo para este momento asi que me armé de valor y lo besé. Fue un beso sencillo pero a la vez tan dulce, y aunque al principio le sorprendió, tras unos segundos lo siguió. Yo también le gustaba y eso me hizo muy feliz. Quería quedarme así para siempre.

Y TE CONOCÍ A TI [INAZUMA ELEVEN] [YAOI]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora