Y TE CONOCÍ A TI [INAZUMA ELEVEN] [YAOI]

EL ATAQUE

Por fin llegamos a Hokkaido después de una hora larga de viaje. Bajamos del avión y salimos a la calle. Estaba a punto de anochecer. Yo estaba tiritando porque hacía mucho frío, pero Shawn debe de estar acostumbrado a esta temperatura, ni siquiera le dio un escalofrío.

-Sígueme- me ordenó Shawn. Atravesamos unas calles anchas cubiertas de nieve. Me encanta Hokkaido, es precioso cuando nieva, es muy... Romántico.

-¿A dónde vamos?- pregunté.

-Nos dirigimos a una casa que hay en aquella montaña- señaló al frente -Allí vivía con mis padres y mi hermano Aiden antes de...- dejó de hablar porque yo sabía a qué se refería.

No tuvimos que andar mucho y la montaña no era muy alta. Nos encontrábamos delante de una casa vieja de madera. Se notaba que estaba deshabitada desde hace tiempo. Shawn entró primero abriendo la puerta con dificultad, y después pasé yo. Por dentro era mas acogedora de lo que aparentaba. Aún tenía los muebles de cuando vivían aquí, aunque estaban desgastados.

-Esta noche dormiremos aquí y mañana iremos a su base y les atacaremos cuando memos se lo esperen. Tú puedes dormir en mi antiguo cuarto, yo me quedaré en el salón- sentenció, y se sentó en el sofá.

-¿Perdona? Tú duermes en tu cuarto que para eso es tu casa, yo me quedo en el salón- dije firmemente.

-Insisto en que duermas en mi cuarto, a mi no me importa. Estás más acostumbrado a las comodidades que yo- dijo serio.

-Que no Shawn, tú vas a dormir en tu cuarto como que yo me llamo Axel Blaze.

- suspiró y al ver que poniéndose serio no iba a conseguir convencerme, decidió usar otro método... -Ayy venga Axel- se levantó del sofá, me agarró del brazo y me acercó a él.

-¿Q-qué estás haciendo, Shawn?- me puse muy nervioso y mis mejillas obtuvieron un leve rubor. En parte me gustaba que me tuviera cogido así, pero la otra parte decía que esto no estaba bien y a este paso no conseguiría olvidarme de él... Intenté separarme pero me tenía cogido de manera que no podía zafarme.

-Veeenga que sé que estás deseando dormir en una cama calentita y muy cómoda. Es más te voy a dejar que duermas con mi lobito de peluche, para que te proteja y te cuide- me miró y sonrió como él sabe para hacerme sentir especial, aunque ya no siento lo mismo de antes.... -Porfiii Axel, si no no dormiré tranquilo. Anda hazlo por mi- y me puso ojos de cachorrito. No me pude resistir, asi que acabo cediendo.

-Bueno vale, yo dormiré arriba. Pero la próxima vez será al contrario.

-¡Bien!- y se separó rápidamente de mi. Lo tenía todo planeado. A aprovechado lo que siento por él para salirse con la suya. ¡Que tramposo! Aunque en parte me a gustado -Venga a dormir. Te acompaño a la habitación.

Subimos unas escaleras y andamos un largo pasillo hasta el final, donde se encontraba la puerta de su cuarto. Entré antes que Shawn. La habitación era muy bonita. Tenía muchos juguetes para niños pequeños, una gran ventana al fondo y dos camas, una a cada lado de la sala; a parte de armarios, estanterías, mesas, sillas, etc. Observé durante unos segundos el cuarto y después me dirigí a la cama en la que ponía "SHAWN". Le dije a Shawn que ya me iba a dormir antes de tumbarme en la cama. Me acomodé y cerré los ojos pensando en lo extraño e increible que es todo esto, cuando oigo unos pasos acercándose y siento un suave y blandito peluche con forma de lobo que colocan en mis manos.

Pasadas las horas me despierto. E vuelto a tener una pesadilla con la decisión que debía tomar. ¡Parece todo tan irreal! Es increible la de cosas que me han pasado en estos días. Tenía miedo de volver a tener otra pesadilla así que decidí quedarme despierto hasta que fuera de día. Como estaba aburrido y no sabía qué hacer, fui a ver cómo estaba Shawn. Bajé despacio y sin hacer ruido. Cuando llegué abajo vi a Shawn a punto de salir por la puerta.