-Pero es que no tengo suficiente confianza en mí mismo.
-¿Por qué?
-Porque tengo la impresión de que dentro de mí no hay nada. No tengo personalidad, soy de un color indefinido. No tengo nada que ofrecer a los demás. Ése siempre ha sido mi problema. Me siento como un recipiente vacío. Dentro no hay ni una mísera cosa a lo que se le pueda llamar contenido.