Capítulo 44

817 66 4
                                    

POV MAI
Pensaba que era difícil aprenderse un guión completo en una semana, pero ahora se que es pan comido en comparación a recordar parte de tu vida en dos días cuando no tienes ni la más remota idea de como lograrlo. Aun no inicio y ya me siento cansada, no sólo es el hecho de no poder recordar semanas importantes, sino también  ser invadida por una inquietud difícil de explicar, me consume una tristeza enorme al ver los rostros de todos y saber que los conoces pero no sabes como los conoces y también el hecho de recordar a la persona con la que menos conversaste, dije que recordé a Tsurugi, los recuerdos que vienen a mi son de él con otros jugadores en un partido de fútbol, recuerdo al oponente, el marcador final, incluso que bailé al final del partido para una artista de ese planeta pero las personas que están a mi alrededor, todo el Earth Eleven, son simples siluetas a las que no logro distinguir sus rostros, es terrorífica la escena.
-Atzuko-san ¿todo bien? - me llamo un chico moreno muy alto, recordé que estábamos en la que parece ser mi habitación para iniciar a recordar a todos.
-Esto... Si, disculpa... Estaba pensando... - respondí con una sonrisa forzada.
-¿Preocupada por no recordarnos? - pregunto sorprendiéndome bastante ¿tanto me conocen?, asentí a su pregunta - Conociéndote, estoy seguro que lo lograrás, solo no te desesperes... -
-Eso haré, ahora iniciemos... - dije decidida, este chico se ve muy sabio, se que puedo confiar en el.
-Bien. ¿Con que será apropiado iniciar? - se pregunto a sí mismo... Estoy pérdida...
-¿Porque no por tu nombre? - sugerí con una sonrisa.
-Claro... Me llamo Zanakuro Ichicawa... Y esto... - comenzó a decir con una expresión que me decía que no sabia de que mas hablar, hasta que continuo sobre su relato pasados unos segundos que a mi se me hicieron eternos- Al igual que tu, yo soy un artista: soy actor y.... - seguía pensando que decir, aunque se me quedo muy grabada su profesión: "actor", recordé cuando estábamos en Sand-arias, frente a la bailarina y como, al igual que yo, Ichicawa se asombraba de ese arte. Sonreí al recuerdo.
-Ichicawa-san, ya te he recordado... - dije feliz, esto esta siendo más fácil de lo que pensé...
---------------
Conforme iba avanzando con todos, el tiempo de conversación aumentaba, ya que me tenían que hablar mas, al igual de que yo iba creando una serie de preguntas que nos hacían más fácil la labor.
Después de Ichicawa-san vino Shinsuke, el me repitió su nombre, que era jugador de fútbol y el consejo que le dí acerca de crecer junto a un tal Ibuki y no tratar de superarlo; siguió Matatagi aclarándome su nombre, que era atleta, el consejo que le di de pedirle disculpas a la chica que le gusta y algunas conversaciones que tuvimos; le siguió Manabe diciéndome su nombre, que siempre fue un estudiante sobresaliente, conversaciones que habíamos tenido, la ayuda que le otorgue cuando aclaro sus sentimientos y un libro que me presto convirtiéndose en uno de mis favoritos; continúo Shindou, explicando su nombre, su habilidad en el fútbol y piano, conversaciones que habíamos tenido, me mostró un vídeo donde ambos tocamos una hermosa melodía y una partitura más donde exponía una canción que habíamos hecho para que el peli-ceniza se declarara al llegar a la Tierra; después vino Minaho diciéndome lo común, es decir, su nombre, profesión o habilidad, consejos y conversaciones; agregándole gustos que teníamos en común sobre las series policíacas y me explico un poco el caso de Aylin. Enseguida de que se fue el pelinaranja llego Tetsukado y paso algo similar que con los anteriores aumentando el apoyo que le dí en cuanto a que se armará de valor para que se declarara, y el último de ese día fue Tenma, me explico técnicamente su vida entera, cuando llegó el momento en que recordé todo acerca de él comencé a llorar un poco ya que el si sabia acerca de que yo también soñaba con Katora y aun así el no me defendio, pero después de muchas disculpas, abrazos y lágrimas por parte de los dos lo perdone y me fui a acostar, estaba agotada y con poca hambre así que en cuanto coloque mi cabeza en la almohada caí en el mundo de los sueños.
El segundo día fue más intenso que el anterior, y eso ya es decir mucho, mis alimentos los consumía en mi habitación. Acabado mi desayuno vino a mi habitación Konoha, al principio me parecía super tierna y no me equivocaba, me respondió las mismas preguntas que les había hecho a los otros agregando las experiencias que tuvimos a causa de las bromas de ese tal Ibuki como la salsa picante en la comida o que la pequeña peliverde me confundió con un fantasma, además de los ánimos que nos dimos en el partido contra Ratoniik, al terminar de decirme eso comenzó a llorar y a pedirme disculpas, no me resistí mucho y también lloré; cuando me calme vino Sakura y después Aoi, siguiendo Kusaka, con el realmente fue difícil porque me decía todo lo que sugería y no lo recordaba hasta que me hizo recordar a Banda, al instante recordé a Kusaka y también lloramos, pero era por la pérdida de alguien especial; continúo Aylin, con ella fue todo relajado pero también lloramos cuando la recordé salvándome de aquel rayo, pero trajo algo de bueno... Ya tiene novio; después vino Claire, otra con la que fue difícil y si, también lloramos, al finalizar con ella sentía mis ojos arder, pero ya solo me faltan dos, estoy esperando al que sigue hasta que oigo que tocan la puerta y enseguida entra el chico peliblanco con una caja de cartón en las manos, sonreí en forma de saludo
-¿Estas bien, porque lloraste?- pregunto preocupado
-Tranquilo, solo que estoy conmovida por todo y un poco sensible... - respondí con una tímida sonrisa y le indique con mi mano que se sentara en la cama junto a mi, el hace lo que le índico dejando aquella caja en el suelo, pero ninguno habla, parece nervioso así que decido iniciar yo.
-Bueno... Que te parece si iniciamos... - sonreí provocando un leve sonrojo en el chico, el solo asintió. - Bien comenzamos con tu nombre... -
-Mi nombre es Ibuki Munemasa... - respondió nervioso, así que el es el famoso Ibuki, por fin lo encuentro, pero debo hacer que hable más.
- Esta bien, Ibuki-kun, ¿cual es tu profesión o habilidad? - note un poco de tristeza en su mirada al llamarlo por su nombre, pero le preguntare porque después
-Jugaba baloncesto -
-¿Te di algún consejo amoroso? -
-No, ¿Porque esa pregunta? - pregunto extrañado
-Al parecer soy como la cupido de este equipo, porque hice de casamentera... - ambos sonreímos a mi respuesta - Bueno entonces sigamos, ¿Qué experiencias o conversaciones tuvimos juntos? - se volvió a sonrojar y comenzó a sacar de su caja una máscara algo peculiar y comenzó a explicarme cada una de las bromas que me hizo por venganza al gas pimienta y el jarrón que le estrelle en su cabeza, también el día que estuvimos en el cuarto oscuro y en Gadon. Al terminar no podía creer lo cercana que era a él, había catalogado a Kusaka como mi mejor amigo pero creo que ese papel le corresponde a Ibuki
-Eramos muy buenos amigos ¿verdad? - pregunte sonriente
-¿Aun no me recuerdas? - pregunto triste, negué con la cabeza igual de triste
-¿Hay algo más que hayamos vivido? - pregunte
-Bueno... Me enseñaste a bailar... - respondió y creo que tuvimos la misma idea porque empezamos a mover mis muebles y poner música, el me indico las canciones que habíamos bailado, y así comenzó un hermoso vals, baila bastante bien, creo que hice un buen trabajo enseñándole.
-Bailas bien... - dije
-Eres buena maestra... - dijo con una linda sonrisa
-Tengo buenos alumnos... - respondí sintiendo un mareo que nos obligó a detenernos
-¿Estas bien? - me pregunto el peliblanco preocupado
-Ssi, solo me maree un poco.. - respondí con una sonrisa forzada para no preocuparle aunque siento como si esta conversación ya lo hubiera tenido, camine a mi cama tratando de recordar el porqué y de inmediato sentí otro mareo haciendo que cayera al suelo tirando la caja de Ibuki conmigo, ya no quedaba mucho, solo una bolsa de harina y una lata de refresco de uva vacía, esa lata me basto para recordar todo acerca de Ibuki.
-¿Estas bien Atzuko-san? - pregunto preocupado arrodillándose para quedar a mi altura ya que seguia en el suelo.
-Mune... - comencé a hablar con lágrimas deslizando mis mejillas y el entendió que ya lo había recordado, se acercó a mi y me rodeo con sus brazos
-Me alegro tanto... Atzuko-san... - empezó a decir con la voz entrecortada, fue cuando supe que estaba llorando al igual que yo - Perdón... Debí haberte creído... Ni siquiera se porque desconfíe de ti, tu siempre me escuchabas y aconsejabas, sin embargo yo no pude hacer lo mismo... -
-No podía decirte sobre Katora... - empece a decir
-Ahora lo sé... Perdóname por favor... - apretó el abrazo
-No... - respondí apartándome y viendo sorpresa y tristeza en su rostro...

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*- *-*-*-*-*-*-
Hola a todos!!!
Hasta aquí dejo el capitulo, los dejo en suspenso... Muajajaja
Por fin he tenido tiempo para escribir pero no tanto como quisiera, si les gusto por favor

Votad y comentar

Matta-nee nya
~(*o*)~

La Idol (Inazuma Eleven Go Galaxy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora