Cap #2

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Miré mis manos, ahora eran más pequeñas, mi cabello era esponjoso, traía un vestido con un moño, mi piel era mas oscura, mis pestañas eran mas largas, mis zapatos diferentes y traía un muñeco en la mano.

-Linda! -gritaba una mujer pelirroja-Linda! Linda, ahí estas, me habías preocupado, en donde estabas?

-¿Me habla a mi? -pregunté

-Por su puesto que si, ya vámonos, o el barco nos lleva a quien sabe donde

-¿Usted es Natalia?

-Claro que si, pero dime mamá, no se cuantas veces mas te lo tengo que decir...

-Perdona mamá

-¿Ves a tu padre?

-¿El de ojos azules y cabello laro?

-Claro, ¿Qué te pasa Linda?

Creo que ya entiendo, toco a una niña y me "convierto" en ella, es raro, so debo averiguar como salir.

-Nada mamá, es solo que tengo sueño

-¿Te volviste a quedar despierta aunque te dije que no?

-Si, perdona mamá

-Ta hablaremos después de eso

-Si...

Ya han pasado 11 años desde que entré en el cuerpo de Linda, me acostumbré a todo esto pero... Aveces suelo ver a otras personas volando con alas negras, o blancas, Natalia me dice que es mi imaginación...pero yo no lo creo.

-Linda! -me gritó mi hermanito Bryan

-¿Si?

-Me raspé la rodilla

-Vamos, ven aquí, voy a limpiarte

-Si

-¿No es la tercera vez esta semana? -y lo comencé a limpiar

-...

-¿Bryan?

-...

-¡Bryan!

-Lo siento, es sólo que...

-¿Es solo que que Bryan?

-Es solo que aveces... Veo gente pájaro

-¿Gente pájaro? -dije con un poco de burla

-Si...

-¿Y como es esa "gente pájaro"

-Son... Como nosotros, solo que tienen alas, a veces negras, y otras veces blancas, suelo ocultarme de ellos, no quiero que me las peguen

-¿Que te las peguen?

-Si, juegan a las traes, solo que llevan cuchillos gigantes en sus manos

-...

-¿Hermana?

-¿Tu también los ves?

-Sip

-¿Desde hace cuanto?

-Desde siempre

-¿Alguien más puede verlos?

-No, todos me llaman loco

-Bryan...

-¿Si?

-Yo te creo

-¿Encesio?

-Si, pero si los vuelves aver, a los de las alas blancas quiero que vayas hacia mi rápidamente

-Okey!

Alma perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora