Te tengo

Capítulo 6: Sin ti moriré.

Fin de año llego otra vez me quede sin noticias de Fujimura-kun, esta vez sí que le echo daño de verdad, estaba tan preocupada que pegue un brinco del susto al ver que mi móvil sonó con un tono escandaloso.

-¿Si, dígame? Pregunte nerviosa.

-Soy yo Ryuusuke ¿Qué haces hoy? ¿Pasarlo sola? Es broma.

-Pues has acertado ¿Para qué me llamas tan repentinamente?

-Es que no estás en casa y quería verte.

-¿Verme? ¿Para qué?

-Debe haber un motivo, bueno dime donde estas para ir a buscarte, te tengo una sorpresa.

-Estoy en la plaza de "Ebisu Garden Place"  cerca de la escultura.

-Estaré en un tic, tac- me ha colgado sin dejarme hablar, siempre hace lo mismo. Pero tenía razón no ha tardado nada -¿Y bien? ¿Nos vamos?- En ese momento sentí como alguien llamándome -¿Te pasa algo? Vamos sube.

Primero fuimos a una tienda de ropa allí me compro un vestido de noche de color rojo que no hacía falta pero él insistió diciendo que era un regalo de navidad, luego él me empezó a peinar.

-¿Por qué haces todo esto?

-A dónde vamos hace falta que estés radiante.

-¿Eh? ¿A dónde vamos?

-Te voy a llevar a un hotel e recebado una mesa para nosotros dos. Por un momento me asustado.

-Uf pensé otra cosa.

-Si pensaste eso acertaste también, después de cenar tenemos una habitación recebada. Termino de peinarme me dio la vuelta y me beso, era diferente de los de Fujimura-kun era más maduro como el sabor de un vino de cosecha -hay que darnos prisa o perderemos la reserva. Yo asentí con la cabeza, me cogió de la mano fuerte y me llevo al hotel. Recordé cuando Fujimura-kun me cogió de la mano para llevarme a su jardín donde nos besamos por primera vez, ¿Pero qué hago recordando esto? Tengo que concentrarme ahora mismo estoy con Ryuusuke-san.  

Nos sentamos en una mesa con vistas al mar. Fue un lindo recuerdo que no me gustaría que se borrara.

-¿Te gusta la vista? Lástima que la vista que yo veo no la puedas ver a menos que te mires a un espejo porque es maravillosa.

-No digas burradas que me sonrojare.

-No son burradas es lo que de verdad veo. Yo empecé a ponerme nerviosa ya que sabía que después de cenar yo sería su postre.

-Si me disculpa voy a ir al baño.

-No te fugues, si no te seguiré.

-Gracioso, después de tanto tiempo que me moría para que me lo pidieras así, estate tranquilo.

Cuando salí del baño escuche algo que me sorprendió, eran dos trabajadoras del hotel.

-¿Te has enterado que el hijo pequeño de Fujimura-sama no podrá asistir a la fiesta de fin de año? Porque dice que en noche buena volvió a su casa con una fiebre alta y lo han tenido que hospitalizar.

-¿De verdad? Pobrecito, siempre él ha tenido una salud delicada, como me gustaría cuidarlo ahora mismo.

-Pero si es un niño al lado nuestro.

-¿Y qué? Es un hombre ¿No?  Cuando oí eso recordé sus palabras y fue cuando me di cuenta que es verdad de que ya no es un niño sino un hombre.   

-Pervertida.

-Disculpe ¿Lo que habéis dicho es verdad?

-Sí, su propia madre lo confirmo.

-Gracias, por informarme- corrí hasta la mesa donde estaba con Ryuusuke-san –lo siento ya sé que te dije que no me iría pero alguien me necesita.

-Valla seguro que ya te has enterado y eso que le prometí que aria lo necesario para que tú no te preocuparas, incluso me dijo entre delirios que se rendiría y que dejaría de luchar por ti me aseguro que me elegiste a mí.

-¿Hizo eso?

-Sí, créeme ese tío te quiere que te entregaría a otro con tal de que estés feliz y en el fondo tú lo amas a él ¿Verdad? Si tanto le quieres ¿Por qué no vas al hospital?

-Ryuusuke-san gracias. Le bese en la mejilla y me dirigir al hospital.

Ya en el hospital pregunte por él me dijeron que lo llevaron a reanimación porque le  había subido la fiebre que  ha hecho que tuviera un paro cardíaco y que estaban haciendo lo mejor posible pero estaba muy débil. Mis lágrimas no dejaban de salir.

-Lo siento, ¿Por qué lloras? una chica tan guapa no debería de estar manchando sus ojos de esa forma y más porque el rime se te está corriendo. Era un chica alta con el pelo largo muy guapa, saco un pañuelo y mientras me limpiaba el rime de la cara me fije que sus ojos eran del mismo color de Fujimura-kun.

-Gracias pero no hacía falta.

-No es nada mujer, ¿Tú también vienes de una fiesta de fin de año?

-No exactamente.

-Yo estoy aquí porque de repente me llamaron diciendo que mi hermano pequeño le subió la fiebre y ahora estoy muy preocupada. Era la hermana de Fujimura-kun con razón los mismos ojos.

-¡Señorita!, el joven porque ha preguntado ya está estable pero no sabemos cuándo despertara.

-¿Puedo verlo?

-Lo siento, sino eres familiar no.

-Yo soy su hermana mayor y ella es mi prima así que somos familia.

-A entonces si podéis pasar.

Llegamos a la habitación las dos juntas, su hermana me dio un pequeño empujón para que entrara.

-Al fin te conozco en persona, todo este tiempo mi hermano me ha vuelto loca hablándome de ti incluso dijo que sin ti se moriría.

-Este tonto siempre metiéndome en líos.

-¿Por qué en líos? El amor no es un lio.

-Si te ha contado todo deberías saber que soy su profesora de idiomas, si se supiera que le amo me prohibirían enseñar y el nombre de tu familia manchado por mi culpa.

-Va, tú no te preocupes yo me case con chico de 14 años más joven que yo y no pasó nada.

-¿Eh? ¿De verdad?

-Sí, bueno al principio se complicó un poco pero luego se arregló porque me quede embarazada y no tuvieron más remedio que dejarle casarse conmigo- me conmovido su historia -tu y yo tenemos mucho en común seremos buenas cuñadas. Nos reímos hasta llorar.

-Por cierto ¿Cómo te llamas?

-Betty Lorren.

-Eres Americana.

-No, me lo cambie después de morir mi ex-novio para protegerme.

-¡A! Es como me contó mi hermanito, yo soy Kabuto Nami encantada de conocerte  cuñada. Lo dice sonriendo, yo también lo espero. Por ultimo le beso mientras él esta inconsciente y veo una lágrima bajar por sus dulces mejillas, allí entendí año nuevo vida nueva y que si él no está en ella yo no sabría qué hacer.