Capítulo 43

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Un niño de apenas un año que cabe donde sea y apenas aprende a hablar me había echo darme cuenta de una cosa: capaz y no lo quiero como le dije, lo quiero mucho más que eso y de lo que creía, me puse a analizar toda la noche, quizás y lo que sienta por Tn no es nada diferente, es que me cuesta tanto trabajo aceptarlo y darme cuenta, se me hizo difícil querer y no decirlo solo por decirlo si no sentirlo cuando lo digo y ahora ¿amar? Creo que tendré que aprender para poder aceptar que yo puedo amar, quizás y no sea tan difícil pero tampoco le quiero mentir a Tn y decirle que la amo cuando no es cierto y no lo siento.

Narra Tn

Baje y vi a Kevin sentado en el sillón, estaba pensativo, tenía hambre, al verme en el espejo no creí que fuera yo, estaba tan gorda y agh! No puedo acordarme y que no me de para abajo, giro su cabeza y me siguió con la mirada, la servidumbre ya servía la comida en platos y se apresuraron.

Kevin: ¿Te sientes bien? -alzo una ceja-

Tn: Si, sólo tengo hambre.

Kevin: ¿Haz visto tu cara? -suspiro-

Tn: Ni me digas -bufe-

Kevin: Ok, voy a salir con Jackson -saco las llaves de su auto- cualquier cosa puedes llamar.

Asentí y lo vi salir, no le quise decir nada, ahora sola con 5 niños, suspire pesadamente y solté el aire tratando de calmarme, pusieron el plato al frente de mi y pronto salían Bastian y Byron en brazos con 2 señoritas más de la servidumbre, según los murmuros, escuche que se pusieron de acuerdo para ayudarme con los niños, eso me quito un peso de encima, los sentaron en las periqueras y pusieron un plato en ellas, comenzaron hacer ruidos y cuando les daban de comer me veían y les sonreía. Cuando termine de comer, termine de darles yo, conviví un poco con ellos, sabía que en unos minutos los otros 3 acabarían con mi paciencia en cuanto empezaron un llanto al unísono, ambos fruncieron en ceño y me agarraron de la mano, subí las escaleras con ellos y con cuidado de que no se cayeran, cuando me encontraba en la habitación el par se esforzaba por ver en las cunas, los cargué para que pudieran verlos y en cuanto Bastian vio a Katerine frunció el ceño.

Bastian: Shhhh, No! -le ordenaba que no llorara, reí-

Tn: Vallan a jugar, tengo que cambiar a sus hermanos -salieron disparados-

Narra Kevin

No sabía a donde ir, quería desestresarme de los llantos nocturnos, a primera hora y de todo lo que tuviera que ver con niños, en una avenida me dieron un periódico, me estacione un momento y comencé a ojearlo suspire, estaba aburrido. Leyendo el periódico se me ocurrió una idea, quizás y sirva de algo...

Entre a mi despacho no sin antes ordenar a Amelia que cada una que llegará la pasara, buscaba una niñera y la tenía que encontrar hoy. Una señora de aproximadamente 45 o 5O años apareció en la puerta, camino hasta mi y se sentó frente al escritorio.

Kevin: ¿Usted es? -observe la hoja en donde tenía los nombres y teléfonos de todas-
XXX: Etelvina, Etelvina Peña -contesto, suspire iba a presentarse- He trabajado en un colegio de monjas, e cuidado a los hijos de las reenes que se encuentran en el penal, también a los hijos de los soldados que se van a la guerra, estoy muy bien preparada.

Pero que estaba diciendo... ¿En qué iba a convertir a mis hijos?

Kevin: Yo.. Yo le llamo....

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XXX: Soy Gisela, tengo 34 años de edad, me gusta cuidar niños -sonrió- trabajo para mantener a mi novio y así el me mantiene contenta a mi, ¿puede venir conmigo? Somos inseparables...

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Xxx: Me llamo Amy, tengo 16 años, no he trabajado en ningún lado y planeo cuidar niños para comprar mis cosas... ¡Es que mi mama no me entiende! -grito y comenzó a contarme su vida-

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XXX: Soy megan -dijo cuando estaba enfrente de mi- porfavor deme el trabajo! -se puso de rodillas y comenzó a rogar diciendo miles de cosas que no le entendía, su voz chillona y creía que la sacaria volando por la ventana-

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Una rubia de un muy buen cuerpo se puso frente a mi, me acomode en el asiento.

XXX: Me llamo Kelly, tengo 18 y cuido niños desde hace 2 años -comenzó a enredar su cabello en su dedo, estaba más entretenido en sus pechos que en lo que decía- y he trabajado en jardines de niños, en guarderías y con varios famosos... -concluyo- también cuido maridos -río y se hizo hacia adelante- ¿quieres mis servicios? -sonreí pícaramente-

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Dalia: ¿Encontró a alguien señor?

Kevin: Ninguna -suspire frustrado-

Dalia: ¿Porqué los de seguridad sacaron a la rubia? -reí cuando me acorde-

Kevin: No importa.

Dalia: Si me permite, mi hija los puede cuidar, ella no tiene hijos y su ilusión siempre fue ser mamá, estoy segura que los cuidaría perfectamente.

Kevin: Que venga mañana -le sonreí- gracias por la sugerencia.

Me sonrió y se fue casi corriendo, vi a Bastian bajar de la escalera y voltee hacia arriba, la reja no estaba, bufe, cuantas veces tengo decir que no la deben quitar, cuando estaba abajo se quedo sentado en el suelo, me sonrió y lo tome en brazos.

Kevin: Cuando entenderás que no debes bajarte, te puedes caer -lo regañe y salí con el al jardín-

XXX: Señor, la chica insiste en que usted la quiere ver -hizo una mueca-

Kevin: No la dejen pasar -me asintió y se regresó-

Estuve analizando el jardín, la piscina se veía deteriorada, se veía muy sólo... Voltee a ver Bastian que veía todo y entrecerraba sus ojos por el sol

Kevin: Creo que papá tiene que hacer unos cambios aquí -le hable al niño que recargó su cabeza en mi hombro-

Diario de un Sicario. (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora