13.Mojado

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El chico del metro me sonrie con dulzura, pero noto un brillo de maldad en su mirada.
Le miro a los ojos y le oigo susurrar "esto no acaba aqui".
Si, sospechas confirmadas, es él.

-Elisse estos son Aston, Fred, Steven, Jonnatan, Luke y el suyo no te conviene saberlo- Dice Ben sañalando al de piel tatuada.

-Creo que ya nos conocemos- se adelanta este con una media sonrisa arrogante- Soy Federick Walker preciosa.

Hago un fingido gesto de cordialidad y procuro alejarme de él lo antes posible, pero un chaval de pelo rubio con mechas azules me detiene.

-Nos la hemos encontrado de camino. Estábamos vigilando por si pasaba algun pederasta y la intentaba violar. Ya sabes, lo normal...- Se pasa la lengua por los labios, y le da una calada a el cigarro que tiene entre los dedos.

-Sois unos idiotas- digo con repugnancia- Ahora vuelvo.

Miento. No pienso volver.

Camino por los pasillos sin saber muy bien a donde me dirijo, y llego a la cocina.
O mas bien, al desastre que hay por cocina.

Hay cajas y cajas de pizza amontonadas en la encimera, y un monton de platos sucios en el fregadero.
La nevera esta entreabierta y se pueden ver las multiples botellas de alcohol que hay dentro.

Abro la puerta de uno de los pequeños armarios que hay repartidos por toda la habitación y saco un vaso de cristal. Lo lleno de agua hasta arriba y me lo bebo de un trago.

-¿Una copa nena? - dice un tío al que no he visto en mi vida al tiempo que se acerca a mi tambaleándose. Le da un sorbo a su vaso y me lo ofrece.
Puedo oler el alcohol desde donde estoy, y de repente, siento un inmenso asco hacia todo lo que me rodea.

Me meto en la habitación más cercana y cierro la puerta detrás de mi. Me aseguro de echar el pestillo y suspiro.
Estoy sola. Por fin.

O eso es lo que creo hasta que oigo un desagradable sonido que parece venir de un baño que no había visto antes.

Me acerco con la intención de investigar un poco y cuando entro veo a un chico agachado, con la mitad de la cabeza dentro del vater echando lo que viene a ser la pota.

-E-eh p-perdona, ¿estas bien?- le toco suavemente el hombro y se gira. Es Chad.

-Elisse que hac..- le da una arcada y se vuelve de nuevo hacia el retrete- ¿que haces aquí?

-Estaba buscando a Ben- miento. No quiero que sepa los motivos de por qué he llegado a esta habitación- ¿Y tu?

-Creo que he bebido demasiado- responde.

-Yo también lo creo- suspiro y me arrodillo junto a el agarrándole del brazo- Ven, voy a llevarte fuera.

-Si, oye..

-Que- Suspiro y le miro directamente a los enrojecidos ojos verdes que tiene. Espero pacientemente a que se recomponga y se piense lo que va a decir.

-¿Puedes buscar a James?

¿Qué? ¿James esta aquí? No tenía ni idea. Creí que estaría en el baile con una de sus innumerables amiguitas, montandoselo por turnos con cada una de ellas.

-¿Dónde esta?

-No lo se..- dice pensativo- la última vez que le vi estaba fuera con un grupo de chicas.

-Ah ya, que raro ¿no? - me rio con ironía y me levanto del azul suelo de azulejos- Voy a por él.

Salgo de la habitación dejando a Chad vomitando con la cabeza en el retrete y camino en dirección al jardín, esquivando a mi paso los cuerpos de tíos que están borrachos como cubas, y procurando ingnorar los eroticos bailes de tías ligeras de ropa.

Cuando por fin llego a la puerta de la casa, echo un vistazo a mi alrededor buscando a James.

Al fondo, cerca de la piscina, diviso a un grupo de chicas rodeando a una figura un poco mas alta que ellas.
Supongo que sera él.

Cuando estoy a punto de llegar, una voz masculina me detiene.

-Preciosa, ¿te habías olvidado de mí?- me doy la vuelta y veo a Federick Walker con sus caracteristicos tatuados brazos cruzados.

-¿Qué quieres Walker?- rufunfuño. No tengo ganas de discutir.

-Nada, pensaba que estabas perdida.

-Si, estoy perdida dentro de una casa - digo con ironía -es lo mas normal del mundo ¿no? perderse dentro de una casa.

-Solo queria asegurarme. Hay mucho pervertido aqui dentro.

- Ah, ¿y tu no te incluyes entre ellos? - me entra la risa y espero a que me conteste con algun comentario desagradable y se vaya, pero se queda quieto, mirandome, asi que sonrio y digo con voz dulce- Federick tengo que ir a buscar a una persona.

-Te acompaño.

Suspiro. Que haga lo que quiera.

-Vale.

Camino hasta James y aparto a todas las chicas a empujones, entre gritos y unos cuantos «oye tia pero de que vas, ponte a la cola» que me ponen de lo mas nerviosa.

-Johnson, Chad te esta buscando.

Me mira a los ojos y sonrie enseñando sus dientes blancos y perfectos pero no dice nada.

-¿Me estas oyendo? Ve.

-¿No puede venir él o qué? - responde- ¿Se le han olvidado las piernas en casa?

Todas las chicas de su alrededor se empiezan a reir de su comentario, pero a mi no me ha hecho ninguna gracia.

-Si te esta llamando sera porque él no puedo venir ¿no crees? ¿O tengo que explicarte eso tambien?

- No te preocupes, que no quiero ninguna de tus explicaciones- Se rie y de repente, mira a Federick y frunce el ceño- ¿Que hace este aqui?

-¿Tienes algun problema?- dice él mientras se frota los puños en señal de amenaza.

-No hay problemas de ningun tipo- intervengo poniendome en medio antes de que empiecen a liarse a puñetazos.

-Eh eh tranquila niñapija. Solo estaba bromeando.

-Pues no veo la gracia.

-Si eres mas sosa que las demás y no tienes sentido del humor la culpa no es mia.

Ese comentario me hace estallar.
Le cojo de la corbata y tiro de ella hacia mí hasta tener su cara pegada a la mia.

-Mira capullo, tu amigo esta en una habitacion con un pedo impresionante- digo con furia pero en un voz lo suficientemente baja para que no me oiga nadie mas que no sea él- Si a ti lo unico que te importa es lo que tiene que ver contigo, y no con los demás, allá tú, pero ahora Chad te necesita y sin embargo tu estas aqui ligando con estas- echo una mirada furtiva alrededor- Asi que si de verdad eres alguien, ve allí y ayúdale.

Cuando termino, cojo aire y respiro profundamente.

Entonces, miro de reojo a Federick y despues al vaso que tiene en la mano.
No me lo pienso dos veces, en menos de lo que se dice "hola", se lo arrebato y lo vuelco sobre la cabeza de James.

Sonrio con maldad.

-¿Tengo o no tengo sentido del humor ahora?

Y me alejo con aires de superioridad, dejando a todas esas chicas boquiabiertas, a James flipando y a Federick con una cara que parece decir "Bien hecho preciosa".

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uola! hoy tengo que dar las gracias..

Lo primero, gracias a mi mejor amiga, mi elo, x ayudarme y sacarme de dudas cndo m atasco.

Lo segundo, a maria, miniña bonita, por apoyarme y confiar en mi.

Lo tercero, a mi inesita, que lleva cnmigo en este proyecto desde el principio.

Y por ultimo, a todos lo que leeis este libro y lo disfrutais, sabed que es todo por y xra vosotros.

Gracias, gracias gracias e infinitas gracias.

Os quiere,
vuestra lau:)

Atrévete a odiarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora