65.

215 21 0
                                    

— ¿Sigues enojado porque no acepte quedarme en tu casa ese día?

No respondió solo se limitó a mirarme con cara triste.

—Demonios, Liam no podía quedarme ahí.

— ¿Por qué? —dijo por fin dejando de ignorarme.

—Porque si y ya.

—No, hay algo que no me quieres decir. —tomo mi mano entrelazando nuestros dedos y sonríe inconscientemente ante el gesto.

—Ya te dije el porqué.

—No, esa no es la razón. —dijo insistiendo a que le dijera la verdadera razón, pero no me iba a rendir tan fácil.

— ¡Ya te dije porque!

— ¡Esa no es la razón! —dijo riéndose porque le parecía gracioso la situación.

— ¡Porque te pones caliente y allí estaban tus padres! —dije al mismo tiempo en que soltaba su mano y tapaba mi boca con esta, me rendí muy rápido y fácil.

— ¿Es porque me pongo cachondo? —al parecer a él le parecía gracioso la situación.

—Si... —dije sin poder evitar sonrojarme.

—Tengo muchas razones para ponerme así y lo sabes. —sus grandes manos me acercaron a su abdomen, alce la cabeza encontrándome con sus labios rojos por el frió que hacía en ese entonces, nuestras bocas se unieron en un torpe y lento beso, sonríe en medio de este, aun no sabía cómo me había enamorado de este idiota.


Hate Me » L.P ✔ EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora