Incorpore mi cuerpo y salí corriendo del ático, un montón de ideas pasaron por mi mente en ese momento, ideas absurdas que serian simplemente imposibles en este mundo.
Pasaron los días, Abril y yo nos mudamos a la casa de verano de la familia dejando intentando dejar atrás todos los malos momentos por los que habíamos pasado en aquel lugar.
"Abril...vamos a dar un paseo para que conozcas los alrededores..." Debía admitir que mi comportamiento por más que me esforzara era de lo mas anormal, de cierta manera sentía que Abril lo sabía y aunque no pudiera decirme con palabras que todo estaría bien lo podía ver en su mirada.
"Jo...nathan" Me quede inmóvil por unos segundos e inmediatamente me pare frente a Abril agachando mi cuerpo y esperando que esas palabras hubieran salido de la boca de Abril pero era inútil por mas que le pedía a Abril que repitiera esas palabras ni un sonido salía de su boca, aunque tampoco podía decir con certeza si había sido ella o solo mi imaginación tratando de darme esperanzas para que no me derrumbara.
Después de haber acabado el paseo deje a Abril en su habitación y me fui a dar un baño.
"(Tengo que encontrar una casa en la ciudad, no puedo vivir aquí con Abril para siempre ella necesita tener una hospital cerca y yo necesito tener una ruta más accesible y rápida para llegar a mi trabajo...me toma más de 1 hora llegar de aquí hasta las oficinas...)"
Termine todo mi trabajo pendiente y me fui a dormir con todos los ánimos por el suelo. Escuche un ruido fuerte golpeando la puerta de enfrente, agarre una pistola que estaba escondida en uno de los gabinetes de mi cuarto y fui hacia la entrada...la puerta estaba abierta, entre en pánico y fui corriendo a la habitación de Abril esperando que estuviera bien, cuando llegue a la habitación de Abril vi que estaba dormida y logre calmarme un poco pero tenía que encontrar al ladrón.
"(¿Qué hago? no puedo dejar a Abril sola, tampoco puedo sentarme y esperar a la policía ya que les toma mucho tiempo llegar aquí...ah mierda ¿Qué hag-? " Sentí que alguien me miraba por detrás y medí la vuelta inmediatamente esperando encontrar al ladrón pero lo único que encontré fue ese maldito muñeco enseñando esa sonrisa grotesca en su rostro desfigurado, me agache para agarrarlo y escuche un grito grotesco.
"¡¿PERO QUE DEMONIOS?!" Me aleje del muñeco que se estaba moviendo de un lado a otro, como por acto reflejo intente dispararle al muñeco hasta que lo logre y el muñeco cayó al suelo derramando sangre de su cuerpo.