Todo lo que podía hacer era mirar el techo, no podía dormir, no podía estar tranquilo, esta casa no me gustaba para nada.
"Jonathan... ¿estás despierto?"
"¿Pasa algo? ¿Es que acaso no puedes dormir?" Abril asintió con su cabeza y en eso levante las sabanas de mi cama haciéndole gestos para que viniera. Abril se lanzo corriendo a mi cama mientras se sambutía en las sabanas.
"...Papá...papá el ¿no va a volver nunca verdad?..." No sabía que contestarle, era mi hermana y no quería decirle tales palabras, pero... Abril solo tiene 8 años y yo 7 aun así ella no reflejaba la imagen de una hermana mayor todo lo contrario ella me daba el sentimiento de alguien a quien debía de proteger aun que me costara la vida, de todas maneras no es como si mi vida valiera algo.
"No, el...el no volverá jamás (no quiero darte falsas esperanzas)" Abril solo se quedo callada mirándome fijamente mientras una tibia lagrima brotaba de sus ojos verdes.
"Gracias...gra-gracias por no mentirme Jonathan"
Es todo lo que recuerdo.
A la mañana siguiente cuando desperté Abril no estaba. Me cambie y me aliste para salir con mi madre y mi hermana, salir no era algo que comúnmente hacíamos normalmente desde que murió mi padre.
"¡JONATHAN, ABRIL RÁPIDO TENEMOS QUE IRNOS!" Que debía hacer no encontraba a Abril por ningún lado, ella no pudo haber escapado no era lo suficientemente valiente como para hacerlo. Salí y entre en cada cuarto evitando toparme con mi madre, hasta que subí al ático y pude ver a Abril sentada mirando así la pared totalmente inmóvil...de alguna manera tenía miedo.
"Abril tenemos que ir-" Quería salir corriendo en cuanto Abril se dio la vuelta, mi hermana estaba llena de sangre en todos lados toda su ropa, el suelo y aquel muñeco que había encontrado. Miraba todos lados, mi cuerpo temblaba y Abril solamente se quedaba ahí sentada mirándome. No podía dejar a mi hermana así.
"¡ABRIL, ¿QU-QUÉ TE PASO? Ven iremos con-!"
"No me...no...aquí...por favor... ¡AYÚDAME!" En ese momento no sabía que responder y solo me quede mirando a Abril atónito, tenía mucho miedo y no podía moverme pero tenía que ayudar a Abril...no sabía que hacer.
"A-Abril...-" Agarre a Abril del brazo y salí corriendo de ese lugar. Cuando llegamos abajo mi madre se quedo espantada, ¿cómo no iba a pasar eso? Ver a tu hija cubierta de sangre no era nada común, mi madre salió corriendo inmediatamente hacia el carro gritándole al conductor que la llevara al hospital en eso mi madre volteo a verme con ojos llenos de lagrimas y horror...quería morirme.