Los 8 Días de Oscuridad

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Salte desde el árbol y caí al río, me di cuenta que era demasiado rápido, el agua se decoloraba, primero rosa… luego… roja.

Corrí con el corazón en la garganta, a lo lejos divise la fortaleza. Podíamos ganar.

Andrés casi me alcanzaba, me pisaba los talones, pero cuando lo note, había llegado, grite:

-¡Venid y observad! ¡La nube de sangre se ha expandido por vuestro amado reino!

Entonces el gran sabio, con su capa meciéndose con el viento, dijo:

-…Ha llegado…

Una vez en el techo de nuestra fortaleza notamos como aumentaba el aroma a muerte

Un pequeño tornado en el cielo, dejo ver a Andrés, el hablo:

-¡Yo!... Soy Andrés… ¡Señor de las tinieblas, de la violencia  y las  groserías! ¡No hay forma de escapar de mí! ¡Muajajajajajá!

Coágulos de sangre volaron desde el volcán, el calvo dijo:

-¡Disparad las catapultas!

Los sabios prepararon las catapultas y las dispararon

Las prostitutas volaron por los cielos, chocando contra los coágulos, destruyéndolos.

Poco después, nosotros y los caballeros del reino salimos en combate, Andrés invoco a su ejercito oscuro.

Empezó la batalla.

Vagueinerous: Días de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora