ESTRELLAS CRUZADAS (PAUSADA Y CAMBIADA)

Capítulo 7: Archer, the heartbreaker.

Los mecanismos en mi cabeza empezaban a girar a toda velocidad, tratando de procesar el hecho de que Jase y Damon fuesen gays.

Pero era al regla de vida, los chicos guapos y majos eran homosexuales.

Volví a sentarme en mi sitio, ignorando las miradas de extrañeza que me dirigía Adam. En cuanto acabó la película cogí a Damon del brazo y literalmente le arrastré hasta el baño de chicos, por suerte no había nadie allí.

-¿Qué demonios te pasa Ever?

- ¿Eres gay?- fue una pregunta un poco estúpida, ya que era obvio, si no no habría pesado a Jase.

- ¿Cómo te has enterado?

- No eres muy discreto a la hora de ocultar tu amor.

- Eh... me has visto.

- Sí, pero lo que yo quiero saber es, ¿Le caes mal a Adam solo porque eres gay?

- Sí y no.- le miré extrañada.- Es decir... no le caigo bien por todas las palizas que se llevó Jase por mi culpa. Porque somos pareja.

- Pero no es tu culpa, Jase sería gay contigo o sin ti.

- Lo sé, pero al verle conmigo le pegaron. Ahora que ya está resuelto todo, ¿te importaría que cambiásemos de tema?

- Sí, lo siento. Salgamos de aquí.

En la entrada del baño nos esperaban Sandra, Jase y Adam con una expresión extrañada.

- Te lo cuento luego.- le dije a Sandra sin darle tiempo incluso a preguntarme. Ella simplemente asintió.

- Oye, hay una fiesta de unos amigos míos cerca de aquí, ¿nos pasamos?- dijo Adam.

- No sé...- dije poco convencida.

- Oh vamos Ever.- Sandra hizo pucheros.

- Deja de hacer eso, pareces un perro apaleado, sabes que no puedo resistirme.- ella simplemente sonrió victoriosa.

Nos subimos al coche de Damon mientras veía como él y Adam se dirigían unas miradas asesinas. No creo que estuviesen muy contentos por ir juntos de fiesta, pero no era mi problema.

La casa de la fiesta era fácilmente identificable por el ruido y las personas borrachas que salían y entraban.

Entramos y en poco tiempo nos hicimos con unas bebidas, todos excepto Damon y Adam.

- Tengo que conducir.- se justificó Damon.

- No me apetece.- dijo Adam cortante.

Veinte minutos después tuve que ir al baño, cuando traté de preguntarle a un chico dónde estaba éste vomitó y por poco me salpicó. Subí hasta el tercer piso, todo lleno de adolescentes hormonales que poco les faltaba para hacerlo. Delante del baño se había formado una cola de diez personas.

Cuando encontré una habitación con baño entré corriendo, casi gritando de la alegría; al volver a salir había alguien tirado sobre la cama, lentamente me acerqué y al verle la cara retrocedí.

- ¿Archer? ¿Qué haces aquí?- pregunté unos instantes después.

- Estoy de fiesta.

- Estás tumbado sobre una cama, no creo que eso sea una gran fiesta.

- Para mí si lo es. La monofiesta del sexy Archer sobre la cama.- río.

- Te lo tienes muy creído.- dije y después me di cuneta de que estaba borracho.

- ¿Por qué me has dado plantón? Creía que quedaríamos, es más, vi tu mirada, ibas a a decir que sí, pero luego tu estúpido móvil sonó.

- Lo siento.

- Bah, da igual, pero ¿por qué me odias?

-No te odio- <<sigo sintiendo algo por ti.>> gritaba internamente.

- Sí lo haces, nunca podré olvidar aquella mirada dolida, el día que me viste con Charlotte.

- Da igual.

- No da igual.- dijo incorporándose finalmente y acercándose a mí, retrocedí, pero a cada paso hacia atrás que daba el se acercaba más hasta que me arrinconó contra la pared.- sigo queriéndote, sigo echando de menos tus ojos, tus sonrisas y sobre todo, tus besos.

- Yo...- traté de hablar pero el me calló posando sus labios sobre los míos, el beso empezó con delicadeza pero finalmente nos dejamos llevar por la pasión, enredé mis brazos alrededor de su cuello, jadeantes nos separamos para coger aire y cuando nos estábamos acercando de nuevo la puerta se abrió y una joven con el pelo a mechas entró.

- Charlotte.- gruñí. Ella simplemente me ignoró y se acercó a Archer.

- Me has dejado sola en la habitación.- dijo agarrándole por el cuello de la camisa. Los observé de hito en hito, él ni siquiera se apartó, se quedó mirándola intensamente mientras mi corazón se resquebrajaba, me atusé el pelo y tratando de contener las lágrimas abandoné la habitación lo más rápido que pude, pude escucharle llamándome pero era demasiado tarde.

- Por favor ven.- susurré. Aunque sabía que el no vendría aún así tenía la esperanza, pero una vez más me había fallado.

Busqué a Sandra desesperadamente mientras las lágrimas corrían por mi rostro, finalmente, tras buscar en vano decidí ir a esperar cerca del coche.

Delante del coche estaba Adam.

- Mierda, él no puede verme así.-musité.

Por suerte él todavía no me había visto, pero como la noche no podía haber ido peor tropecé con un cubo de basura y caí estrepitosamente llamando la atención de todo el mundo y sobre todo de Adam, que se acercó rápidamente a mí.

- ¿Estás bien?

- Sí.- dije tratando de ocultar mi rostro para que no pudiese ver el maquillaje corrido.

- ¿Segura?

- Creo que sí.- rió y me ayudó a levantarme, giré la cabeza y le miré. CRASO ERROR.

- ¿Qué ha pasado?- negué con la cabeza y el asintió, lo cual agradecí.- ¿Quieres que pasemos dentro y limpiarte el maquillaje?

- Sí, por favor.

Esperamos la cola del baño y finalmente entré, mientras Adam esperaba fuera.

Me observé en el espejo, mis ojos estaban rojos, tenía rastros de sombra, eyeliner y rimel por toda la cara y el pintalabios se me debía haber ido entre el cine y los besos con Archer. Lavé mi cara y me quité todo el maquillaje, corrido y no corrido.

Cuando salí del baño Adam me sonrió.

- Estás mucho más guapa al natural.- le sonreí halagada.- ¿Me concedería un baile, señorita?

- Por supuesto, caballero.- reí mientras íbamos a la pista de baile.

Estaba sonando Shake it Off de Taylor Swift, una de mis canciones favoritas. Comenzamos a movernos al son de la música.

- 'Cause the players gonna play, play, play, play, play. And the haters gonna hate, hate, hate, hate, hate. Baby, I'm just gonna shake, shake, shake, shake, shake. I shake it off, I shake it off.- comenzó a cantar poniendo voz aguda.

Gracias a Adam me lo estaba pasando super bien, tanto que no podía para de sonreír, aunque ésta se congeló en cuanto vi a Archer aparecer con Charlotte colgada del brazo, nuestras miradas se cruzaron y se me encogió el corazón. Había vuelto a caer en sus redes, la rabia me llevó a hacer algo de lo que estaba segura que luego lamentaría, enredé mis brazos alrededor del cuello de Adam y le besé, << Chúpate esa Archer>> pensé antes de dejarme llevar por el momento.