Maldicion maldicion maldicion maldicion!!!!!!.-Dice Joe repetidas veces mientras golpea una de las paredes del cuarto de Andy.
Cálmate Joe no es tu culpa, no podías hacer nada.-Trata Andy de calmar a Joe.
Pude no haberlo dejado solo, pude...........pude haberlo acompañado. No insistí, después de haber visto todo lo que paso con esos chicos... -Se lamenta Joe entre lagrimas.-Soy una mierda como amigo. El confiaba en mi, siempre digo que lo cuido y lo protejo, pero le he fallado Andy, de la peor forma. Daría lo que fuera porque yo estuviera en su situación, el no se merecía nada de esto...... Andy no dice nada solo le da un fuerte abrazo a Joe por la espalda.-Bueno yo pienso que eres un gran amigo y en mejor novio que podría desear. Te preocupas por tus amigos, siempre piensas en lo mejor para ellos aunque tu luego te quedes destrozado. Y luego desde lo más mínimo que pasa siempre estas ahí, dando todo lo que tienes-Dice Andy abrazando aun mas fuerte a Joe.
Tu si sabes como hacer que me calme.-Dice Joe dando la vuelta para dar un tierno beso en la frente de Andy.-Bueno yo tenia otra idea para poder calmarte, pero si dices que ya estas calmado.....-Dice Andy mordiendo su labio.
Estoy mas calmado pero he pasado por un mal día y no estaría mal disfrutar un poco más de ti y de tu compañía -Dice Joe rozando sus labios con los de Andy. Joe metió sus manos por debajo de los pantalones de Andy apretando fuertemente su trasero haciendo que este soltara un leve gemido. Andy solo movía su entrepierna contra la de Joe mostrando le de esta manera la erección que se había formado bajo su pantalón.
Parece que alguien se ha emocionado bastante rápido.-Dice Joe mientras agarra la erección de Andy-¿Que dices Andy, dejamos que nuestro amigo salga a divertirse?-Pregunta Joe mientras que juega con el botón de pantalón de Andy. Andy solo haciente mordiendo sus labios tratando de que ningún gemido escapara de su boca.
Lo siento mi amor pero no te puedo entender, dime que es lo que quieres que haga.-Dice Joe haciéndose el tonto. Chu......chupamela.......Joe..... por.....por favor.......-Pide Andy entre gemidos. Joe solo tiene una sonrisa de satisfacción.-Eso es lo que quería oír.-Dice Joe bajando el pantalón y el bóxer de Andy de un solo tirón dejando su gran erección a la vista. Joe tomo el pene de Andy por la base metiéndose el resto en la boca, dando pequeñas mordidas en la punta haciendo que Andy arqueara la espalda mientras soltaba varios gemidos.
Mas.........rápido Joe........mas rápidooooo!!!!!-Suplica Andy mientras entrelaza sus dedos en el cabello de Joe tratando de hacerlo ir mas rápido. Joe hizo caso a las suplicas de su novio y comenzó a aumentar su ritmo, subía y bajaba chupando el miembro de Andy en toda su extensión, lamiendo y jugando con sus testículos de vez en cuando.
Aaaaaaaaaa!!!!!-Fue lo único que pudo gritar Andy antes de correrse dentro de la boca de Joe. El menor trago todo lo que había en su boca, para luego sacar el pene de Andy de su boca sin antes dar unas cuantas lamidas al glande de este.
Lo siento por no avisar.-Dice Andy mientras ve como Joe vuelve a ponerse de pie.-No te preocupes mi pequeñito yo amo todo de ti.-Le responde Joe mientras le quita le quita la camiseta a Andy para así dejarlo completamente desnudo, recorriendo cada centímetro de su cuerpo con sus manos haciendo que Andy soltara pequeños gemidos y se estremeciera con cada contacto que hacían las manos de Joe y su cuerpo.
Ahora pasemos a algo mas intenso.-Dice Joe volviendo a agarrar una delas nalgas de Andy pero esta vez con una de sus manos juega con la entrada de su novio. Cla.....claro pero......pero primero debemos estar en la misma.......situación. Como quieras pequeño.-Responde Joe sacándose todas sus prendas para quedar desnudo al igual que Andy.
Así me gusta.-Dice Andy lanzándose al cuello de Joe para dejar pequeñas marcas en el ademas de guiar a Joe hacia la cama tendiéndose sobre el, sintiendo como el pene erecto de Joe rozaba sus nalgas. Antes de pasar a algo mas Andy se estira un poco para poder ver si le quedan condones en su mesita de noche, pero se encuentra con la sorpresa de que no le queda ninguno.
