La chica de cabellos negros caminaba por la fría madera, su cuerpo se encontraba más frío de lo normal, su respiración estaba agitada, sentía que algo le faltaba y ella sabía perfectamente que era aquello que necesitaba y anhelaba.
Él.
Aún podía sentir sus caricias en su rostro, las estupideces que le mandaba a través de mensajes, los besos que alguna vez se dieron. Extrañaba con locura a Luke, se enamoró de un chico menor que ella, él la hacía la persona más feliz, la hacía reír, necesitaba a Luke en su vida.
Sin embargo ella sabía que eso no pasaría.
Aún recuerda perfectamente aquel día, el peor día de su vida.
25/ marzo/ 2012
Luke caminaba feliz hacia la casa de su novia, que a decir verdad no había sido nada fácil que Megan aceptará ser su novia, el día que se lo propuso salió corriendo como si de una niña pequeña se tratase.
El rubio río en forma de burla al recordar como la pelinegra había salido corriendo "Si tuviera la lámpara de aladino, te pediría las tres veces, mi amor" murmuro para si mismo
Nadie jamás imaginaría, que esas serían las últimas palabras del rubio.
Todo paso tan rápido.
Un asalto...
Una víctima...
Una muerte...
Aquél día Megan lo recordaba como si hubiera sido el último día de su vida.
La policía había dicho que Luke había luchado hasta el último momento de su vida, pero por más que lo hubiera hecho 20 apuñaladas nadie las resistiría
Pero, en realidad ¿Habia sido un asalto o lo habrían matado sin piedad alguna?
Megan lloraba desconsoladamente, nadie podía sacarla de aquella depresión tan grande, ni siquiera su mejor amigo sin contar que era un idiota con todos sus letras.
"Tienes que salir adelante, Megan" le aconsejaba el castaño de ojos azules "No puedes seguir así"
Megan hacía caso omiso a todas las palabras que alguien le decía, ella sólo quería a Luke de regreso, que no hubiera venido a su casa aquel horroroso día, que nadie lo hubiera querido asaltar, y mucho menos que se lo estuvieran recordando a cada momento.
Era difícil olvidar cuando tu novio era un integrante de una banda reconocida, las noticias no paraban de hablar de lo mismo, todos dando condolencias a la familia y a los chicos que alguna vez ayudaron a la banda de su novio a llegar a donde estaban.
One direction a decir verdad no recordaba bien el nombre de esa banda y, era lo que menos le importaba en ese momento.
Tomo entre sus manos su celular, lo primero que hizo fue ir directo a sus antiguas conversaciones con la persona que llegó a querer más que a su propia vida.
"Sigue siendo un perdedor"
¿Eso quieres hermana?
"Sigue siendo un perdedor"
Vamos repitelo, para patearte el trasero, Megan
"Yo"
Besame el trasero, Lucas
"Sigue siendo un perdedor"
Lo haré después de habertelo pateado
