Los dias oscuros

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Estuve en gran riesgo de morir por los cortes que me había hecho, no había despertado durante 3 dias completos donde en mi mente fue la peor de las torturas. Veía los peores recuerdos que tenía, esas horribles imágenes pasaban tan lentas como que si mi cerebro quisiera que siga sufriendo mas de lo que sufrí.
Al 4 dia pude despertar, estaba muy débil y no podía moverme.
Lo primero que vi al despertar fue la cara de mi madre, no quería verla nunca mas.
Mamá: hola hijo, ¿como te sientes? - Me preguntó como si nada hubiese pasado. No le contesté mirándola fijamente.
Mamá: Edward... sobre lo de la otra vez - Le interrumpí antes de que terminara.
Edward: No, no quiero hablar de eso - le dije fríamente volteandole la cara.
Mama: Esta bien, Madison ha venido a verte, dijo que necesitaba hablar contigo cuando te mejores.
Asenti aun viendo hacia otro lado, sentía asco de ser hijo de ella, me preocupaba que toda la escuela se enterara sobre lo que había hecho mi madre.
Mama: Me ire a casa cariño, debes descansar, llámame cualquier cosa.
Edward: bien - contesté muy frío.
Cuando mi madre se fue trate de dormir un poco mas, había tenido las mismas pesadillas que tuve las 3 últimas noches, esas horrendas y tristes imágenes que pasaban tan lento.
Me desperté por el sonido de mi celular que me estaban llamando, era Madison.
Edward: ¿Madi? - pregunté medio dormido.
Madison: Hola Edward ¿como estas?
Edward: bastante bien, creo, dijo mi madre que viniste.
Madison: Si, he ido como 3 veces aunque no estabas despierto.
Edward: lo siento por eso.
Madison: Descuida, ¿crees que podrás venir cuando te sientas mejor? Necesito hablar contigo sobre algo.
Edward: ¿y no podemos hablarlo aqui? - pregunté nervioso por saber que pasaba.
Madison: No, es algo que tendremos que hablar cara a cara. - dijo muy fríamente.
Edward: Esta bien, cuando pueda levantarme te mandaré un mensaje
Madison: Bien - fue lo único que dijo antes de colgar el teléfono.
Estaba nervioso sobre que quería hablar, me ponía muy ansioso.
Pero solo Madison sabia si era bueno o malo...

Diario de un chico suicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora