.Sobredosis. (pausada)

.Día2.Mediodía.Una sonrisa familiar.

Al despertarme solo una imagen recorría mi cabeza, el estúpido de Nikolas saliendo de aquel taxi y saludandome con tanta normalidad...

--¿¡Pero en qué estoy pensando!? ¿¡Qué es eso Del!? ¿¡Celos, curiosidad, envida!? ¡No puede ser!- Dije lebantandome del sofa sin parar de reir nerviosamente.

Tenía hambre asi que me fui a la nevera, que curiosamente estaba vacía, por suerte había un super en la calle de atrás, cojí mi bolso, miré si estaban las llaves del piso y me fuí.

Rapidamente bajé las escaleras, me dirijía a la puerta y de ella surjó y un mechón naranja, y luego otro y luego una cabeza, era Nikolas... Al verme me sonrio, yo abajé la mirada y lo aparté, poco, pero lo suficiente como para poder pasar por la puerta, y me fui hacía el super.

Estaba en el supermercado comprando todo lo que necesitava para acabar de pasar la semana, meditaba por la sección de conjelados cuando un escalofrío recorrió toda mi espalda, pero no tenía frío, al acabar de cruzar todo el pasillo y cojer algunos platos precocinados choqué contra algo, sorprendentemente familiar, me caí al suelo y conmigo cayó tambien mi bolsa de la compra. Empeze a recogerlo todo muy estresadamente y al terminar, alcé la vista, era Luke... llevaba una capucha negra y me fijé en que le había crecido el pelo; me estaba mirando, con una sonrisa en la cara. De pronto me extendio su mano para ayudarme a levantarme, lo miré con cara de niña pequeña que no necesita ayuda y me levanté solita.

--Como siempre, aceptas mi ayuda.-dijo Luke sarcastico.

--No necesito tu ayuda, ni la tuya ni la de nadie.

Me giré con la intención de prosegur con mi compra. Pero en cuanto quise darme cuenta Luke me había agarrado del hombro y estaba nuevamente mirando en direccion a él.

--¿Te pudo invitar a un café por los viejos tiempos? Y por el empujon claro...-dijo con una sonrisa muy amable en la cara.

--No creo que pueda estoy muy ocupada.-respondí mas fría que nunca.

--Del...

Esa palabra, esas tres letras, ese nombre, ese apodo, ahora mismo sentía como si acabasen de clavarme una flecha muy afilada, en el corazón no, en el alma.

--Mm va-vale, pero con una condición, tienes que contestar a todas mis preguntas.

--¡Dicho y Hecho!- dijo Luke con una enorme sonrisa en la cara.-¿A las 5?

--Vale, ¿en el café Nostalgia?(asi es como llamabamos a ese cafe para quedar)

--Perfecto, ¡alli nos vemos!

Mientras Luke se iba me quedé mirando su figura empequeñeciendo... Se que esta mañana lo había visto, pero no podia creermelo, hacía dos meses que no mantenía una conversación con un amigo...

Seguí con mi compra y me fui a mi casa para preparar mi comida, me estaba muriendo de hambre por momentos.

Al llegar al pasillo de mi edificio, vi a Nikolas, estaba hablando por telefono y me escondí detras de una columna para que no me viera...

--Sí... m... ¿hoy? Sí, me va bien tranquila.

Ese tranquila me dejó petrificada...

-Claro estaré aí... vale...

¿Que estaba haciendo? ¿Me estaba escondiendo, estaba espiando a Nikolas? ¿Por que? No tenía ninguna necesidad de escuchar sus conversaciones por telefono con chicas misteriosas... Asi que salí de la columna y me dirijí silenciosamenre hacía mi piso.

Nikolas me vio de reojo....

--Bueno entonces nos vemos ai... ¡adiós!

Estaba casi dentro de mi piso cuando de pronto se escucho claramente a Nikolas gritar:

--¡Que pase una buena tarde, señorita gritona!

Eso logró sacarme una sonrisa, no lo niego... Aun así me dirijí a mi cocina ya que me estaba muriendo de hambre.