Ya que terminé de comer (había comprado bastante pero al final solo comí un tarrón de fideos instantaneos), dediqué un rato a decidir que me pondría, no era un acontecimiento especial, pero no quería dar una mala impresión después de tanto tiempo sin vernos.
Eran las 4 y 45 asi que cojí mi bolso y me fuí hacía el portal donde me esperaba un taxi al que había llamado previamente; estaba en el portal y me encontré con Nikolas de nuevo, estaba recogiendo su correo...
--Señori...-intentó pronunciar él cuando yo le lanzé un simple y directo.
--Tengo pisa.
Al atravesar la puerta hacía la calle me giré un poco y vi a Nikolas de reojo, se encontraba confuso con la mirada ausente.
Al llegar al café vi a Lucke, que me estaba dirijiendo un saludo, con la vista un poco perdida... ¡Espera! No me estaba saludando a mi se despedía de una chica... ¿Quién era esa? Cuando quise darme cuenta ella ya había desaparecido... Me calmé y me senté en la mesa delante de Lucke.
--¿quién era esa?
--...-solo sonrió.
--¡Me dijiste que contestarias a todas mis preguntas...!
--Era una vieja amiga...
Me quedé en silencio pensando que pregunta debía formular primero...
--¿Aún sale con ese tio?
--No lo dejarón hace 2 semanas.
--¿Ella aún le quiere?
--No esta segura...
Un silecio fue formado nuevamente durante unos segundos...
--¿Alguna vez pensaste en contactar conmigo en todo este tiempo?-dije yo a punto de ponerme a llorar
--Sí, pero mi deseo siempre fue interrumpido por los recuerdos de An, de como nos sacó de la marginación que sufriamos yo y mi hermano, ella nos salvó y no quería perderla...-dijo poniendo cara de arrepentimiento.
--Tranquilo no tienes porque ponerte asi.-le dije con una sonrisa tranquilizante.-¿An sabe que has quedado conmigo?
-No... desde que pasó lo de vuestra pelea no ha vuelto a ser la misma, ahora ya no queda con nosotros, sólo muy de tanto en tanto, ahora van con los amigos de Weed...-dijo lanzando una mirada de repulsión al infinito.
Vino la camarera y nos tomó nota de lo que queríamos, se sorprendió porque dijesemos lo mismo al mismo tiempo.
--Bueno y como te va la vida?-dije yo rompiendo un hielo que se ya se estaba derritiendo.
--Bien.. un poco preocup.... quiero decir bien, Pain ahora trabaja en un taller de coches, nos va bien...
La sonrisa nerviosa provinente de Lucke que había sido probocada por una pregunta tan simple como la que acababa de formular me tenía preocupada...
--Bueno si tu dices que va bien entonces tendré que creerte...
Nos llevaron nuestros pedidos, seguimos hablando como si nunca hubieramos estado separados, y llego la hora de irse.
--Bueno ya es hora de cenar.-dije yo levantándome.
--Si ya nos volveremos a ver otro día, y con Pain también.
Me fui fuera del Nostalgía y paré un taxi para irme hacía mi casa.
Al llegar a mi edificio, cojí aire y sonrei, por fin tenía un rato en mi casa...
Estaba en el pasillo de mi piso, cuando de pronto me quede inmovil; una mano había parado mi brazo provocando que toda yo parara, era Nikolas ¿que querría?
--Señorita gritona... ¿porque me hace esto...? ¿Esque no me entiende...?-dijo él con cara de cachorrito...
--No, la verdad es que ahora mismo no entiendo nada... y sabes nose si lo quiero entendrer; entiendeme tu a mi.
No tenía ganas de hablar con él, no entendí lo que intentaba decirme pero me daba igual.
Cojí mi bolso y me dispuse a cojer las llaves, cuando me di cuenta de que hoy al salir de casa no había mirado si estaban... ¡Mierda! No las tenia... Baje la mirada y me senté delante de mi puerta con una mirada perdida pensando en como lo haría para cenar, en como me prepararía para lo de esta noche...
--Señorita gritona... ¿le gustaría cenar en mi casa? A mi no me importa en lo mas mínimo.-dijo él, que entendía perfectamente lo que me estaba ocurriendo.
--Gracias... Nikolas...
Me sentía demasiado tonta como para decir algo más, me sentía avergonzada, y encima ahora estaba a punto de cenar con Nikolas, ¡en su casa! Nose porque pero pensar eso hacía que mi corazón no parase de latir freneticamente...
Al llegar a la puerta Nikolas frenó de golpe provocando que chocara contra su espalda, miré hacía su puerta, y... ¿una chica? ¿que hacía una chica delante de la puerta del piso de Nikolas?
Nikolas comenzó a caminar hacía la chica, haciendo cada paso mas velóz que el anterior, la cojió de un brazo, la alejó aún más de mi y empezarón a hablar...
No entendía nada... a veces podía percibir la manera de hablar de Nikolas enfadada, y un vez había logrado descifrar a Nikolas diciendo que que hacía ahi...
Al cabo de unos minutos Nikolas se volvó hacía mi, y abriendo la puerta de su casa dijo:
--Señorita gritona esta es Mia mi prima, Mia esta es la señorita gritona, mi vecina.
--Porfavor llamame Del·la.-interviné yo un poco molesta por presentarme y diciendo que me llamaba "señorita gritona".
--Mi prima tambien se queda a cenar.-dijo Nikolas dirijiendose hacía la cocina para empezar a cocinarlo todo.
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.Sobredosis. (pausada)
RomanceDel.la Penlak, una chica de 20 años que cuenta con mas torpeza que suerte nos cuenta su día a día dentro de su vida como periodista y sus problemas con las amistades. Y por si eso no fuera poco aparece un vecino que canviara las cosas...