b a d b u s i n e s s

III

Ahora todo tenía sentido, había sido él el que casi me había matado si no hubiera sido por Matt, por eso su BMW estaba estacionado así. No entendía que ganaba él haciendo todo esto.

―Muy maduro de tu parte intentar atropellarme mientras corría―dije llena de furia

―Es tan repulsivo ver que tienes que intentar matarme para obtener mi atención, ¿Tan poco te quieres? Imbécil―okay, lo admito, mis palabras fueron como un acto criminal, pero este era mi pequeño gran problema, cuando estaba enojada ardía Troya entera.

Me diagnosticaron TEI a los 14 años de edad cuando destrocé un apartamento en segundos por el simple hecho de que una amiga mía se había sentado en clase con otra niña. Era una estupidez, pero para mí pareció una catástrofe.

―Lo siento Gret..., pensé que no vendrías y...y no quería sentarme sola― ¿cómo se había atrevido?

María estaba sentada con la piojosa de Lía, estaba temblando y mis lágrimas amenazaban con salir. Todos estaban atentos al pequeño espectáculo que me tenía como protagonista.

No llores

No llores

No llores

Eres una estúpida

Maldita perra fracasada

Pégale un tiro, ¡Hazlo! No te quiere.

O mejor pégatelo tú.

Ya no podía soportarlo, solo corrí y corrí esperando que todo parase. Pero nada pasaba, necesitaba expulsarlo, me estaba asfixiando. Llegué al apartamento nuevo de Londres, claro que todo estaba perfecto, pero yo estaba tan rota...Sólo tenía que remodelarlo.

―Créeme cuando te digo que si quisiera matarte primero haría unas cuantas cosas antes. No me subestimes―no pude descifrar si lo que estaba diciendo lo decía en serio o sólo quería tomarme el pelo.― Además solo fue un pequeño cálculo que salió mal sujetó un mechón de mi cabello y lo puso detrás de mí oreja así como su boca fue hacia esa dirección

― ¿Quieres hacerme un favor? Dile a tu nuevo amigo que la próxima vez que lo vea no fallaré.

Inspiro profundo y rápidamente se apartó; alguien se acercaba.

―Hija, justo estábamos hablando de ti.

Cálmate

Cálmate

Fuiste 3 años a terapia. Esto debería funcionar.

Ya no estas rota

Ya no tanto...

― Creo que el aire libre no le sentó tan bien―dijo el baboso de Seth. Cínico.

Ignoré olímpicamente su comentario.

― ¿Y se puede sabes sobre exactamente de qué?― no tenía ni puta idea de que podrían haber estado hablando estos dos de mí.

Josep se veía nervioso, por lo visto hoy no era su día.

­―Mira Gret...el motivo por el cual te invité fue...

―Navidad―lo interrumpió Seth que tenía sus fríos ojos sobre mi padre―tu padre me pidió que te acompañara.

―No-me-jodas―dije obviamente asombrada.

―Tendré las maletas listas en 20 minutos.

―Vaya... no esperé que lo tomaras tan bien hija, has cambiado

― ¿Qué? ¿Crees que vine para eso? VINE A PASARLA CONTIGO PAPÁ ¿Acaso crees que cohabitaré con este sujeto siquiera por una noche? ¡Por favor padre!, no soy Teresa de Calcuta para andar así de buenas y solidaria con un espécimen que ni siquiera conozco.

―Si piensas que iré con él, será mejor que me vaya, ya no tengo anda que hacer aquí.

Mi padre estaba rojo de la furia, no lo había visto así, bueno, desde que me fui a Londres. Por otra parte; Seth entendió que sobraba en esta discusión y se retiró de la escena.

―Tu maldita boca hará que cometas tantos errores―dijo con un perceptible reproche.

Ahí estaba otra vez, esas ganas de llorar y salir corriendo, solo...solo quería contenerme.

―Por un momento te creí papá―Josep me observo desconcertado―creí tu carta ¡Por Dios! Creí tantas cosas ¿Tú me odias papa?

Ya está, mis mejillas estaban repletas de lágrimas.

―Gretel, por supuesto que te quiero, ¿Cómo no hacerlo? Los negocios no van bien y necesito tu comprensión sólo serán unos días. Tú no me generas dinero hija, y este imperio no crece solo, así que compórtate y deja de llorar como una imbécil.

―Robert ya llevó un poco de tu equipaje al auto de Seth, nos vemos en año nuevo.

Y así sin más salió de casa, tomó su carro y se fue.

Tú no me generas dinero hija

Compórtate y deja de llorar como una imbécil

Era una tonta, una grandísima tonta y él jamás cambiará. Resignada y con pasos pesados deje la casa y un Seth serio e impaciente recostado sobre su automóvil me observaba irritado.

―Hasta que al fin te cansaste de verte ridícula, vamos ya he perdido mucho dinero esperándote.

Y todo se resumía en una sola cosa.

Dinero

HOLAA ESTE ..... BUENO DECIDI SUBIRLA OTRA VEZ PORQUE ESTABA ABURRIDA Y ESPERO QUE LA DISFRUTEN BAI❤❤❤ COMENTEN  Y VOTEN