Noviembre 19
Diario:
Miré mi piel, parecía tan blanca, jamás mis muñecas habían sufrido mi dolor, buscaba mi sufrimiento en aquellos delicados brazos, me di cuenta en lo que me había convertido, un demonio más que intentaba salir de éste su infierno, era como el frío... Un frío suicida. Reuní cada recuerdo lleno de dolor, cada palabra, cada golpe cruzo por mí mente, me arme de valor, un valor tan cobarde, tomé aquella plaquetilla metálica y poco a poco note como aquel color rojo comenzó a brotar entre esa piel que antes había estado tan blanca, tan dulce, tan inocente y ahora sólo mostraba sangre, llanto; dolor.