~ Capitulo 02 ~

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La luz del sol irrumpió por las ventanas iluminando todo en la habitación de el pequeño de ojos miel, el bulto bajo las sabanas se removió y Tony gateo hasta salir de las suaves telas que lo cubrían, palpo sus ojos con los puños cerrados tratando de despertar y escuchó la suave voz del hombre a quien consideraba su mejor confidente.

- Buenos días Señor - Saludo con una sonrisa el hombre de cabellos oscuros y ojos café vestido con un elegante traje, impecable de pies a cabeza.

- Jarvis - Una sonrisa adormilada se dibujó en el rostro del niño de cinco años dirigida a su mayordomo y amigo.

- Tu madre te necesita abajo en una hora para desayunar, Tony - Jarvis se dirigió al baño personal de Anthony y abrió la regadera para que la tina empezara a llenarse poco a poco, salió de él y se detuvo mirando al pequeño, le hizo una señal con la mano para qué se acercara y Tony bajó de su cama acercándose rápidamente a Jarvis quien se agacho para quedar a su altura - Me han informado que tu padre llegara en dos horas - Pronunció con una sonrisa y Tony abrió sus ojos con emoción - Arréglate rápido que María te espera - Dijo revolviendo los cabellos del pequeño Stark y seguido salió de la habitación.

Tony corrió a cerrar la regadera luego de notar que ya había agua suficiente en ella, se despojó de sus vestiduras y entro en la bañera, tomo un pequeño submarino que el mismo había construido y jugó con el mientras se encargaba de quedar totalmente limpio, Tony siempre había sido muy aseado y le gustaba verse bien, algunos podían llegar a decir que era un niño narcisista aunque para su edad ya era muy independiente, Tony termino de asearse y salió del cuarto de baño para vestirse, Jarvis había dejado toda su ropa perfectamente planchada sobre su cama ya arreglada, tomo el pantalón corto color crema, junto a una camisa blanca, con un suéter marrón claro y unos mocasines del mismo color, salió de su habitación y corrió al comedor en donde se encontraba su madre desayunando, se sentó en el asiento frente a ella en una de las esquinas de la gran mesa y al instante una de las caseras se acercó al pequeño con el desayuno, Tony miro su plato con asco, con un tenedor movió la fruta frente a él y miro a su madre quien alzo una ceja cuestionandolo.

- Si no la pruebas, no sabrás si te gusta - Pronuncio su madre para luego concentrarse de nuevo en su plato.

- Ya la he probado mami y sabe horrible - Una mueca de asco se dibujó en su rostro, María suspiro rendida al saber que no podía competir con su hijo, hizo una señal con la mano a una de las cocineras y esta se retiro para luego de unos minutos volver con un plato de cereal en sus manos, lo puso frente al pequeño y este sonrío triunfante, los dos se acompañaron durante el desayuno, al terminar Jarvis se acerco a la mesa y anunció que los soldados habían llegado, Tony se puso en pie rápidamente de su asiento y corrió a la entrada de su casa. María le siguió hasta la puerta en donde se encontraban todos los trabajadores de la casa esperando la llegada del dueño de la propiedad, Anthony con poca paciencia abrió la puerta y corrió en dirección a la multitud de soldados que se encontraban con sus familias y busco a Howard, a unos cuantos metros pudo verlo junto a un hombre uniformado y al General, quién mantenía en sus brazos el cuerpo de un pequeño, aceleró sus pasos y su padre giró para verlo correr hacia él, se agacho a la altura de su hijo y lo recibió entre sus brazos, Tony lo estrechó fuertemente y Howard lo alzó con una sonrisa dibujada en sus labios.

- Te he extrañado bastante padre - El pequeño no lo soltaba, manteniendo sus pequeños brazos rodeándolo con fuerza.

- Y yo a ti pequeño - Howard rompió el abrazo para dedicarle aquella sonrisa que creía difícil borrar.

- ... ¡¡¡PAPÁ!!! - Se escucho un fuerte grito que llamó la atención de Tony quién giró para ver a Thor correr en dirección a su padre, el de ojos azules tenía una enorme sonrisa en su rostro que empezó a difuminarse a cada paso, empezó a desacelerar sus pasos mientras observaba al General acunar entre sus brazos a otro niño, Wotan bajó lentamente al pelinegro que había estado cargando y el rubio de seis años observo detenidamente al chico, era mas bajo que él, tenia el cabello ligeramente mas largo y lo llevaba peinado cuidadosamente, vestía una camisa azul clara, pantalones negros y un chaleco que aunque era de color verde era igual al suyo, acompañado con el mismo cinturón negro, notó en sus manos dos brazaletes negros, su rostro estaba levemente cubierto de ceniza y polvo y tenía los ojos rojos e irritados, una clara muestra de que había llorado poco antes, un hermoso color verde resaltaba entre sus largas pestañas, Wotan intentó acercarse a su hijo para abrazarlo, pero Thor retrocedió al instante, observó al chico que lo miraba de forma inocente, el rostro del rubio no expresó más que confusión y su padre quién lo observaba con preocupación vio a su pequeño de ojos azules retroceder, Thor dió varios pasos hacia atrás y al instante empezó a correr.

- ¡Thor! ... ¡Hijo! - Resonó el grito del General intentando que su hijo se detuviera, en un rápido instinto Tony se soltó de los brazos de su padre, esquivo a su madre y empezó a correr rápidamente tras de Thor, iba tan rápido como podía para alcanzar al rubio, con la vista lejos del suelo y fija en la espalda de su amigo, tropezó con una pequeña roca que le hizo caer de rodillas en la tierra y rasparse las mismas, perdió el rastro del contrario y lagrimas de dolor cubrieron su rostro, empezó a hipar y como pudo se puso en pie, limpio las lagrimas que rodaban sobre sus mejillas y siguió los pasos de su amigo internándose en el bosque.

- ¡Thor! ... - Gritó el castaño mientras hipaba - ¡Thor! ... Sabes que no puedo seguir tus pasos - Pronuncio entre lagrimas y con la voz entre cortada, camino en medio de los enormes árboles tratando de visualizar al de ojos azules, siguió internándose en el bosque hasta notar una figura de espaldas sentada en un tronco, se acerco sigilosamente y noto que se trataba de su amigo, camino hasta él tomando asiento a su lado y le miro con preocupación y auténtica curiosidad - Thor? - Susurro tratando de llamar la atención del contrario.

- Lo siento - Thor dirigió su mirada a las rodillas de Tony, el contrario se miro a sí mismo y luego a levantó la mirada sonriendo débilmente.

- Solo arde un poco, nada que un Stark no pueda manejar - Respondió el peli negro y Thor agacho la cabeza - Por que corriste?

- No lo sé - Respondió aun con la mirada en el suelo y Tony se levanto del pequeño tronco.

- Vamos, no quieres que tu padre se preocupe - Thor se levanto junto a el y lo miro con una pequeña sonrisa.

- Tony, no quiero ir a casa - Thor le miró, esperando que su amigo tuviese una mejor idea.

- Podemos jugar en el bosque - Propuso sonriente y el ojiazul no dudó en ponerse en pie, ambos empezaron a caminar junto al otro y poco a poco olvidaron lo sucedido.

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Un pequeño de seis años, próximo a los siete, de cabello castaño claro y ojos azules, se encontraba frente a un espejo de cuerpo completo. Vestía unos pantalones de gala azul oscuros y una camisa de cuello y manga larga blanca, su madre, Sarah Rogers, esposa del Coronel Joseph Rogers, arreglaba su corbata roja mientras miraba a su hijo sonriente, contaban ambos los minutos para que su esposo y padre, al que no habían visto en un buen tiempo, al fin llegara.
Sarah quería percatarse de que su hijo estuviera limpio y aseado, Steve Grant Rogers era un niño respetuoso y honesto aunque también algo tímido, a causa de sus estudios primarios siempre había vivido en la ciudad junto a la familia de Bucky (James Buchanan Barnes) uno de sus mejores amigos, siempre se mantenía en contacto con su madre y su padre pero ahora eran ellos quienes querían mas que nada en el mundo a su familia unida (aunque para el pequeño esta no era la mejor de las ideas). Steve recién había llegado al pueblo y estaba en la espera de su padre, Sarah terminó de darle los últimos retoques al traje de su hijo y lo miró con una sonrisa.

- Vamos, ya deben haber llegado - La calidez en su voz era palpable, tomando la mano de su hijo, lo guió a la salida de su casa, aquella no era la mas grande pero era hermosa, espaciosa y contaba con un gran jardín, al salir Steve notó que todos los soldados ya se encontraban ahí, miro a su madre quien soltó su pequeña mano dandole a entender que tenía permiso de correr en busca de su padre, Steve empezó a buscarlo con la mirada mientras caminaba, a lo lejos visualizo la figura de su Joseph junto a dos hombres, reconoció que eran Howard Stark y El General Wotan, aquello lo sabía porque desde siempre le había gustado leer mucho el periódico, corrió hasta su padre quien lo recibió entre sus brazos lanzándolo a los aires y abrazandolo fuertemente.

- ¡Que grande estas Soldado! - Pronunció Joseph con una sonrisa que Steve le devolvió al instante.

- ¡Que gusto verte papá! - Habló con entusiasmo y un grito llamo su completa atención, giró para ver como un chico rubio se acercaba al General, vio la expresión en su rostro, luego le vio retroceder y finalmente correr como si de ello dependiera su propia vida, observo la escena atentamente y detallo con la mirada al niño de cabello negro y ojos miel que se encontraba frente a él, notó como también empezó a correr tras el otro niño ignorando los gritos de una mujer que suponía era su madre, Steve no separo su mirada ni un instante de la figura del pelinegro que corría a gran velocidad hasta desaparecer entre los árboles del bosque al que se habían dirigido, el color miel de los ojos del contrario se grabó en su mente, aún segundos después no alejaba la mirada de aquel punto en donde había visto esfumarse al pequeño y es que jamás había sentido tanta curiosidad en saber acerca de alguien.


Time Of Our Lives - Thorki And StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora