Palabras bañadas en hipocresía,
Lagrimas anticipadas sin sagacidad,
Cuando te tuve en mis brazos,
Cuando otorgue con silencios...
Como añoro esa picardía,
Esa perspectiva de vida.
Sofocado por simple impotencia,
Cegado por mera ignorancia,
Cuando carecí de suficiente impavidez,
Cuando estaba vulnerable,
Con el corazón frio al tacto,
Fue allí cuando tu traviesa alma se me escapo,
Es que la vida se pone de cabeza en cuestión de segundos,
Un día te levantas alado de un Ángel,
Y al otro te das cuenta que tenía alas...
Es que yo siempre busque el amor,
Y no me di cuenta que el amor estaba en lo que me rodeaba.