I

676 27 1
                                    


Suspiro mientras trago de una sola pasada mis lagrimas, es inevitable que no llore por todo esto, por toda mi asquerosa vida, la odio, la odio mucho, como siempre soñé y que nunca quise que ese sueño se compladezca al final sucedió: me quede sola para siempre, mi intuición me decía que pasaría y al fin paso y realmente ya estoy cansada de sufrir, estoy cansada de llorar, solo quiero ser feliz como las demás personas, es que ¿acaso yo no merezco ser feliz? Pues creo yo que eso va a ser un no rotundamente.

Un leve golpe me hace brincar del susto, mi corazón late desenfrenadamente al ver como tengo que dejar esta casa e irme a un centro de acogida y yo solo puedo repetirme en mi cerebro como odio mi vida ¡la odio! No tengo a nadie, no tengo familia, no tengo amigos ¿Qué tengo? Nada. Recojo mis últimas pertenencias y las meto de golpe en mi pequeña maleta, bueno se puede decir que también deseo irme de esta casa hace ya bastante tiempo que debería de haber saldo de este pequeño infierno pero alguien me retenía aquí hasta ahora, ya no, me encamino hacia fuera de la habitación y como una bala salgo carreras hacia abajo mientras observo todo con suma atención, mi segunda casa y creo que hasta dentro de un año no volveré a tener otra es obvio que nadie me adoptara, 17 años quien va a querer a una adolescente: nadie.

Peter, amigo familiar se acerca hacia mi cautelosamente y me abraza al verme despidiéndose de mi hasta... no sé cuando lo volveré a ver, el ha sido el único al que le podido dar un poco de mi corazón, se lo ha ganado poco a poco y ahora acostumbrada a su presencia me va a ser difícil no verlo nunca más, el parece leerme la mente porque aprieta su agarre muscular apretando a la vez mis costillas y hago una silenciosa mueca de dolor. Mierda.

-pequeña recuerda que aunque no nos veamos mas tal vez por causa del destino nos encontremos por Londres-enarco una ceja negando a la vez, me llevo mi maleta hacia mi pierna derecha y bajo la mirada, ¿y si tal vez no salgo del centro?, y ¿si tal vez alguien me lleve hacia otro centro y tenga que salir de Londres? Eso nadie lo sabe.

-Peter sabes que eso va a ser imposible-murmuro fríamente, mi mirada fría se interrumpe por un tintineo a la vez de unos golpes en la puerta principal, mierda ya están aquí.

-pequeña solo ten fe en ti y veras que pronto serás feliz, recuérdalo pequeña, nunca te olvides de mi-hago un puchero mientras dejo algunas lagrimas caer por mi rostro pálido, el hace una sonrisa triste mientras veo gotas saladas salir de sus ojos azules, me tienta con su brazo musculoso abrir la puerta y con un gesto me dice que haga una sonrisa, ni de coña podre volver a sonreír en la vida.

-nunca te olvidare Peter, tu tampoco lo hagas-río tristemente y hacemos un choque de mano, prueba de amistad que tenemos en todo estos años

-recuérdalo pequeña se feliz y sabes que tengo mis contactos y en un toque de dedos puedo saber quién te ha adoptado y podre hacerte una visita-guiña el ojo de forma amistosa y abre la puerta con un movimiento fácil, un hombre acompañado de una mujer pasan hacia el salón, ellos sonríe en cambio yo no.

-Hola venimos a por la recogida de (TN) Dawsoon, por favor necesito que usted como amigo de la chica firme estos papeles para poder dar todo más fácil- Peter asiente ante mi mirada triste y desolada y yo solo puedo mirar hacia abajo, me es imposible mirarlo a los ojos y menos a estos señores. En tan solo cuestión de minutos estoy fuera de la casa siendo llevada obligatoriamente hacia un centro al que no quiero pisar ni aunque estuviera muerta.

-pequeña recuerda mi promesa, te juro que iré a visitarte no olvides eso ¿Si? Sabes que por mi te acogería pero sabes que por mis incidentes e historial no me dejan-en un rápido movimiento estoy bajo sus brazos, remueve mi cabello hacia un lado y deja un corto beso en mi mejilla izquierda, dejo escapar la ultima lagrima en el día y con un último abrazo me voy alejando de él, a lo lejos puedo ver como hace un gesto para que le dé una sonrisa, lo hago en forma triste y el niega desoladamente, me encojo de hombros y me despido con un simple aleteo de manos.

will you marry me?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora