Hoy me observe en el espejo como de costumbre, que rara costumbre.
Me observe y me quede perdida en mis ojos, caídos, sin fuerzas y no por no haber dormido si no por ti, observe como poco a poco se agrietaban, grietas rojas.
Grietas rojas, que afirmaban que algo estaba roto dentro de mi.
Observe como se hacían mas profundas, y de repente una lágrima recorrió mi mejilla, cambió de color.
Mi rostro cambio de un color pálido a un color rojizo y pude jurar que en ese momento escuche como algo se rompía.
No sabia si secar aquella lágrima o dejar salir las otras.
Lo que aveces haces.
Al parecer necesitamos otro papel.