Estoy desesperada.
Desesperada por estar entre tus brazos mientras me susurras al oído.
Susúrrame, eres mía.
Dímelo y hazme tuya.
Que no sean solo palabras.
Hazme soñar contigo cada noche y que no quiera otro cuerpo.
Solo el tuyo.
El mío.
Ven, quítame mis miedos y déjame desnuda.
Una flor en otoño.
Una hoja en invierno.