Aquí me encuentro una vez más, dejándote un espacio entre la pared y el borde de la cama.
Me encuentro nuevamente deseando que estés aquí conmigo.
Deseando tus caricias.
Hoy, como todos los días me encuentro divagando entre sueño y sueño, en mi espacio, sin tocar el tuyo.
El tuyo, porque nunca será de nadie más, nadie más que tú, porque es a ti a quien anhelo ver cuando despierte.
Despertar a tu lado.
Mis piernas juegan entre las sabanas como lo suelen hacer entre las tuyas, tus piernas.
Tus piernas y las mías.
Sueña, sueña conmigo cada noche.
Desea, desea que este a tu lado como yo lo hago en este momento.
Anhela, anhela despertar a mi lado como yo lo hago cada mañana.
Ámame, ámame como lo has hecho hasta ahora, y yo lo seguiré haciendo como lo hago cada día.
Te amo.