November.

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Apagas y enciendes la llama, cuando te da la gana. Y yo, que siempre he sido de esas que olvidan en 300 noches, acabó aferrándome a la puta esperanza, que no llevará a ninguna parte y sólo llevara a tu cama. Que ingenua fui, creyendo que por un minuto creerías que el amor se basa en algo más que desabrochar cualquier falda. Seguiras siendo el típico niñato que del amor no sabe nada. Seguiras buscando cualquier cama de la que escapar de madrugada. Seguiras teniendo miedo a amar. Seguiras perdiendo cuando pudiste ganar.
Y yo seguiré ganando, cuando logre escapar de tus sabanas, que me atrapan cada día mas. Será que soy masoca y necesitó de tus labios para sobrevivir.
Aunque muriendo estoy, cariño, quedate un rato más por aquí.