Estaba sobre mi aquella figura con la navaja cerca de mi cuello, estaba tan cerca que pude notar que era una navaja mariposa. Mi cara sudaba a causa del esfuerzo mental que ponía para saber que hacer en esa situación mientras veía la cara de la persona, una chica para ser exactos.
-Así que... ¿intentaste dispararme, no? ¿querías matarme cierto? -Me dijo con una cara tranquila como el agua, como si solo jugara... o como si disfrutara de la escena- no deberías quejarte si te hago lo mismo... ¿verdad? -Menciono en un tono igual de calmado acercando su cuchillo a mi cuello, apostaría que no iba a ser su primera víctima.-No te atrevas a tocarlo... -dijo una voz algo miedosa pero decidida, una voz pequeña pero que se hacia oír grande.
Con cuidado moví pocos milímetros mi cabeza para ver detrás de la figura de la chica sobre mi. Solo pude contemplar la figura de Liddy con mi desert eagle tomada con ambas manos y apuntando a la chica notablemente temblorosa por el miedo, pero por la distancia era obvio que si disparaba iba a acertarle no importa cuanto temblase.
-Tranquila niña... tranquilízate y pon eso en el suelo- dijo la chica con tono algo frío sin cambiar de posición sobre mi pero viéndola con el ovillo del ojo.
-Pr-Primero quítate de encima de el, suela el arma y levanta las manos!- grito esta con voz mas temblorosa que sus manos.
Antes de que la chica se separara de mi alguien mas agrio la puerta, Lid dejo salir un fuerte grito, volteo de sobresalto y disparo dando al techo, la otra persona estaba quieta, pero transcurridos unos 5 segundos tras el disparo esta volvió a ser cociente y se acerco a Lid lentamente, yo veía mientras gritaba cuidando de que mi cuello no chocara con el filo de la navaja.
-¡No le pongas un dedo encima desgraciado!- Dije con pánico de que la lastimase, no podía hacer nada, estaba lleno de ira y miedo, pero mi sorpresa fue enorme al seguir viendo la escena.
-No deberías jugar con eso pequeña, es peligroso ¿como crees que se pondria tu amigo si te lastimas?- Dijo el chico Arrodillados al frente de Liddy y poniéndole una mano en el hombro y extendiendo una sonrisa.
Lid no dijo palabra, pero tenia los ojos cristalinos casi apunto de llorar por el miedo, aunque el chico no hacia nada ofensivo, era pasivo a diferencia de la psicopata sobre mi.
-¿Que rayos haces Samantha?- dijo el chico viendo serio a la chica que al parecer se llamaba Samantha.
-Este desgraciado casi me vuela la cabeza y ahora le estaba devolviendo el favor- dijo esta con cierto enojo en su tono.
-Recuerda que lo que mas importa ahora es prevalecer a la humanidad, aun que si hay algunos que merecen el exterminio- dijo mientras se levantaba y se dirigía a mi con una mano en una especie de vaina para pistolas, era obvio que si hacia algo mínimamente ofensivo nada evitaría mi muerte.
Así que aun que era casi imposible en la situación de un hombre con un arma al frente mío y una loca sobre mi me relaje lo mas que pude. La chica por fortuna se levanto lentamente de encima mio mientras guardaba su navaja, se sentó cerca mío en la cama, a lo mejor queria ser la primera en matarme.
-¿Nombre?- Dijo el tipo como empezando un interrogatorio el cual iba a seguir por mi vida.
-Drake Mercer- Dije sin vacilaciones.
-Mercer... me gusta el apellido- Dijo Samanta mientras reía levemente.
-¿Edad?- Prosiguió el chico.
-18- Le respondí.
-¿Equipamiento?
-Si, una M16, una desert eagle, pocas provisiones guardadas y algunos objetos de valor sentimental, casi todo en mi mochila- Le fui sincero completamente.
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Denegados
ActionEn esta historia la raza humana es invadida por una especie de origen e identidad desconocida, han logrado su gran propósito de llevar a la humanidad a casi su exterminio, o al menos eso cree el protagonista Drake Mercer. Aquí se va a ser testigo de...