Prologo

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En la oficina del profesor de pociones se encontraba un muchacho llorando por culpa de sus penas, por culpa de la felicidad que le fue arrebatada por un incidente desastroso.
Y ahi estaba, el profesor de pociones, Severus Snape tratando de calmar a su ahijado, su rostro no era muy expresivo pero estaba preocupado por este. NUNCA lo habia visto llorar de esa manera tan desgarradora. Estaba tan absorto en sus pensamiento que no se dio cuenta el pocionista que su ahijado le hablaba.
-Serverus....Serverus- En el segundo llamado Snape volteo a ver a su ahijado, tenia los ojos rojos e hinchados de tanto llorar, se veia desarreglado, algo poco comun viniendo de el y mas de un malfoy.
-Serverus, dame la pocion- Dijo el Malfoy con un tono un poco temeroso
-Estas seguro de querer tomarla? Sabes lo que significa, sabes las consecuencias que conlleva Draco...-
Antes de seguir hablando Draco se levanto de su lugar y se dirigio a la cabina de pociones de Snape. Sacando un frasco de ella. Siendo abvertido por ultima vez por su padrino
-No hay marcha atras Draco, una vez que la tomes perderas todo-
-Eso ya lo se Severus- hablaba con un tono desolado- Solo que...ya no puedo estar asi de deprorable, verle cada dia, ver como actua como si nada hubiera pasado, como si no le hubiese importado....actuando como si no le hubiese dicho cuanto le amo-bajo la voz en la ultima oracion, mordiendose el labio inferior para evitar el llanto que se le escapaba de la boca. Decidido, abrio el frasco de la pocion y antes de empinarsela murmuro -Adios viejos recuerdos, adios viejo amor, bienvenido el infierno al que ya estaba destinado a vivir- con eso se tomo la pocion y de ahi, todo se volvio negro y frio....

Goodbye Beautifuls Days[CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora