3. Mételo bien

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Es increíble estar con Nate. Temía que las cosas fueran diferentes en persona, y lo son, son aún mejores. Aquí no se congela cómo por Skype, aquí puedo oír su risa claramente y ver como se le arruga la nariz, no cómo por teléfono. Aquí puedo apreciar su acento, no cómo por mensaje. Y lo mejor: aquí puedo abrazarlo. Sé lo que están pensando, pero no, no me gusta, esta no es una historia de amor o algo por el estilo, simplemente moría de ganas de conocer a mi amigo. Él y Aylin son mis únicos amigos de verdad, los demás son gente con la que socializo. Es difícil saber quien es tu amigo de verdad y quien busca:
    A) Tu dinero
    B) Meterse en tus pantalones

Después de que Nate me invita un helado me pide que lo acompañe por su uniforme, dónde me burlo cuando se prueba una talla muy pequeña, parece mono cilindrero. Después de eso me dice que me tiene una sorpresa, para la cual tenemos que ir a su cuarto.

—Estas seguro de que la 'sorpresa' en tu cuarto no es nada sexual? Por que ya me ha pasado antes– bromeo, él se ríe mientras niega con la cabeza.

—No me quiero acostar contigo Pau, sólo quiero darte algo y después ver una película o algo– me asegura.

—Netflix and chill, huh?– Digo moviendo las cejas juguetonamente , causando que se ría.

—Insistes tanto que estoy empezando a creer que tu quieres meterme en mis pantalones– bromea.

—Si no estuviera tan estúpidamente enamorada de tu primo, y no te conociera, y cubrieras mi requerimiento mínimo de 15 centímetros, tal vez lo consideraría–bromeo.

—Que asco, no menciones a mi primo– responde como cada vez que lo traigo al tema —y no solo cubro tu requerimiento, lo sobrepaso– dice guiñándome, me río.

Por fin llegamos a su edificio, subimos unos pisos y llegamos a su puerta mientras me cuenta cómo tuvo que adelantar su vuelo un día para llegar el mismo día que yo, y un día antes que sus compañeros de cuarto.

Cuando abre la puerta ambos nos damos cuenta que no es así.

—Mételo bien!– Exclama una voz agitada. Ni Nate ni yo hacemos movimiento alguno para entrar o alejarnos.

—Eso intento pero el agujero esta muy estrecho!– Responde otra voz más grave.

—Siempre dices eso y cuando yo lo intento si puedo!– Responde la otra voz molesta.

—Pues tus dedos son mágicos o yo qué sé!– Contesta la otra voz.

—Nate– susurro y me voltea a ver —no estoy diciendo que alguien esté cogiendo ahí adentro, pero para alguien que lee gay smut suena muy convincente– le informo.

—Me das asco– contesta en un susurro igual. En ese momento la primera voz decide hablar de nuevo.

—Hola?

—Um hola... Perdón por interrumpir–dice Nate incomodo.

—Interrumpir que?– Pregunta la voz, acercándose a la puerta. Segundos después un chavo de baja estatura y piel morena aparece en la puerta, sorprendente (para mi) esta totalmente vestido —sólo estamos instalando nuestra computadora– explica y todo tiene sentido. Me río y ambos me voltean a ver.

—Entonces lo que trataban de meter era un cable?– Me río y el chavo asiente. —Juré que era otra cosa– veo como todo empieza a hacer click en su cabeza y su cara cambia hasta que está riéndose conmigo.

—Que pasa?– pregunta la otra voz antes de que llegue otro chavo a la puerta, éste un poco más alto y con la tez más clara. Nos estudia a mi amigo y a mi unos momentos antes de sonreír —Tu debes ser Nate, nuestro compañero de cuarto– afirma y mi amigo asiente – él es mi hermano Santiago, yo soy Rodrigo, pero todos me dicen Queso– explica alegremente y me río.

Bad Ideas #YoSoyBerkleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora