Mary's POV
Cuando mis hermanos vieron a la hija de Aracne acercarse al comedor, todos la miraban horrorizados. Ni que fuera el mismísimo Hades.
Elena la acompaña cojeando. Sus hermanos la ayudan a sentarse, pero ella rechaza la ayuda y viene a mi mesa.
− Hola, chicos.− dice sentándose.
Me mira a mis ojos grises.
− Necesito tu ayuda y no te pongas a gritar.− me dice en español.
− ¿Qué es lo que quieres?− le pregunto en francés.
− Necesito que me ayudes con Itzi. − me dice en francés.− Necesita una cabaña y si se lo pido a Annabeth se negará.
− ¿Y por qué yo?− le digo en español.
− Porque eres como yo, Mary. No lo niegues porque es verdad.− me dice levantándose.
Se va, como siempre, dejando con las palabras en la boca. Será. Sé a qué se refiere. Mi efecto fatídico es ayudar a aquellos que lo necesiten, sin importar una mierda mi vida.
Me acerco a la niña de trece años. Tiene una mirada triste, mientras todo el mundo murmura cosas de ellas. Me agacho para estar a su altura.
− Hola, Itzi.− le digo.
− ¿Qué quieres?− me pregunta seria.
− He oído que necesitas una cabaña...− digo.− Te voy a ayudar.
Se queda con la boca abierta.
− Itzi, cierra la boca o te entrarán moscas.− le dice Elena. La chica le hace caso.
− ¿Dónde está la cámara?− pregunta mirando a todos lados.
− Te dije que Mary te iba ayudar.− le dice Elena.
− Se cómo te sientes.− le digo apoyando mi mano en su hombro.− Que todos te rechacen porque tu madre sea...
− ¿Spiderwoman?− me ayuda Elena. Nos reímos.
− Eso.− digo entre risas.− Lo importante es que nos tiene a nosotros...
− Pensaba que eran mis amigos hasta que mi madre me reconoció.− dice señalando a la mesa de los Tres Grandes.
− Una vez me pasó algo parecido...− dice Elena.
− ¿Y qué hiciste?− le pregunta..
− Si te lo resumo mejor... madre e hija en un hospital, padre traumatizado y Hiroshima 2015.− le digo.
Nos reímos.
− Si quieres me vengo...− le dice Elena. La niña asiente mientras yo niego.
− Cuando te haga la señal te acercas, Mary.− me dice.
− Esto no puede ser bueno.− digo cuando la veo levantarse y dirigirse a la mesa de los Tres Grandes.
Elena empieza a hablarles a los chicos. Tiene una pose desinteresada. No les mira a la cara, pero no deja de hablar. Jason empieza a sudar.
− No quiero saber que les está diciendo.− dice Itzi.
− Les está recordando lo que pasó la última vez que alguien le hizo eso.− digo.− Esta niña si que sabe meter miedo.
Me acerco a la mesa de Apolo.
− Como no intervengáis, estallará la Tercera Guerra Mundial.− le digo a Pablo y a Mia en español. Los dos miran la mesa.
Elena está de pie. Roja como un tomate y tensa.
− Ya voy yo.− dice Pablo. Se levanta y agarra a su novia.
− PABLO, SUELTAME QUE LES VOY A SACAR LOS OJOS Y HACER UN COLLAR CON SUS ORGANOS.− grita.
Pero no la suelta.
− Relájate por los dioses.− le dice.
Elena respira hondo y se relaja. Alguien suspira a nuestra espalda. Me guiro. Francis contempla divertido la escena. Mía se tensa.
− El amor. Qué bonito es cuando es mutuo.− dice. Itzi se nos acerca. Mira a Francis.
− UN METARMORFOMAGO.− grita señalando los ojos de Francis. El comedor entero se ríe.
− Que mona.− le dice el chico.
− Elena, cuando ve un gato le pregunta por su carta.− dice Mía. Sonríe nerviosa.
Nos reímos.
− Yo también lo hice una vez con diez años.− dice la niña con una sonrisa.− Creo que mi lechuza murió por el camino...
Sonrío. Le lanzo una mirada de "tú y yo tenemos que hablar" a Mia. Asiente.
− Elena da miedo.− comenta Itzi.
− Pero en el fondo es muy buena persona.− digo.
Itzi se va a comer junto a los Hijos de Hermes. Elena se va indignada del comedor.
Me siento al lado de Itzi. Me da igual lo que digan mis hermanos. Me da igual si creen que los traicioné.
− ¿Por qué te caigo bien?− me pregunta.
− Si le caes bien a la loca de Elena, a mí también.− le digo. Me sonríe.− Te pareces a ella.
− Todos me lo dicen.− dice pensativa.
− Eres divertida y tienes respuesta para todo.− le digo.− Eso me gusta de la gente.
− ¿Por eso eres amiga de esa loca?− me pregunta. Sonrío.
− Sí. Ella me enseño muchas cosas a lo largo de nuestra amistad.− digo. Me mira a los ojos.− Me enseño que con una sonrisa todo se ve de otro color.
Sonríe.
− ¿Por eso siempre hace el tonto?− me pregunta.
− Sí. Ella siempre dice que todos los días se levanta lista para luchar contra la tristeza y el aburrimiento.− le digo. Asiente.
Nota de la autora:
Me pidieron que publicara un capitulo desde el punto de vista de un hijo de Atenea. Y... TACHAN. Aqui esta.
Yo cumplo mis promesas. Yo soy una escritora de mente abierta. Si quereis dar ideas me las podeia dar.
Atentamente Vuestra Escritora Favorita Clara
Editado el 4/10/16
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La hija de mi enemiga. (CCM #2)[EDITADA]
Fanfiction¿Y si Aracne tuviese hijos? ¿Y si llegasen al Campamento? ¿Como serían? Continuación de Apolo y Hermes: ¿Buena combinación?