CAPITULO 63

5 0 0
                                    

Terminé de arreglarme:

era un vestido azul con una chaqueta de punto negra unos tacones blancos y un collar dorado

 tenía una sensación en el estómago, no era solo por estar usando la ropa que mi madre me regaló sino una mucho peor, sentir que todo se va a ir a la mierda.

Samuel se estacionó y me di cuenta que estábamos en el mismo restaurant de mi cita con Louis cuando nos corrieron la hora e hicimos el amor en el auto, no pude evitar sonreir. Bajamos y entramos, nos hicieron pasar a una mesa sumamente separada de todos y nos sentamos, era una mesa cuadrada, Samuel estaba a a un lado de mi madre y yo al lado de Samu con el otro asiento a mi lado desocupado, justo en frente de la mujer que nos abandonó...
-Buenas noches, señora, señorita y caballero –nos puso los menú sobre la mesa- ¿Qué desean servirse?.-
- Yo –dijo mi madre- quiero algo liviano, una ensalada cesar nada mas.-
- Yo... la especialidad de la casa –dijo Samuel con una sonrisa.-
- Yo... -miré el menú- eh... .-
- ¿Te gustan los mariscos? –preguntó mi madre.-
- Si.-
- Entonces el especial de mariscos –respondió por mi- y una agua mineral y para ellos ¿una coca cola está bien?.-
- Si ma –dijo Samu.-
- Perfecto –susurré en voz baja mirando la mesa en la que me había sentado hace un tiempo con Louis.-
- ¿ya habías venido? –preguntó mi madre mirándome fijamente.-
- Si, hace un tiempo.-
- ¿Con Louis? –preguntó gracioso mi hermano y solo asentí con la cabeza.-
- Que lo disfruten –dijo el mesero colocando los platos sobre la mesa.-

Empezamos a comer en silencio y la tensión se sentía, y era muy notoria. No nos mirábamos, cada uno con la vista fija en su plato. Mi madre respiraba mas forzadamente, se notaba nerviosa. La miré unos segundos... ¿era posible parecerse tanto a alguien que uno odia?...
-Ma -dijo Samuel- ¿pasa algo?.-
- Yo... -susurró- ya no aguanto mas esto –levantó la mirada y tomó un sorbo de su vaso-necesito contarles todo.-
- Pues dilo –dije.-
- Bien... -respiró profundo- Cuando me casé con su padre, todo era perfecto, todo –dijo sonriendo- todo estaba bien. Pero todo cambió cuando quedé embarazada, para él fue un fuerte golpe era como si... el no pudiera permitir que le diera amor a alguien que no fuera a él, cambió, fue un cambio tan... rápido. Comenzó a beber de una manera tan peligrosa y llegaba a altas horas de la mañana y naciste tu cariño –apretó la mano de mi hermano- fue como un detonante para él y empezaron los golpes –una lágrima rodó por su mejilla, pero por alguna razón no me dolió- era un sufrimiento extremo, tenía que encerrarme en tu cuarto –dijo mirando a mi hermano- y dormía contigo para que el no fuera a hacerte nada.-
- Tranquila –dijo Samuel.-
- Después, lo enfrenté y entró a rehabilitación. Me sentí tan feliz, dijo que quería cambiar y lo hizo. Tenía sus recaídas pero yo siempre decía: "es menos que antes" "es un paso necesario para que cambie por completo". Era un infierno constante y luego, se fue de la casa para jamás volver. Después... .-
- Supiste que estabas embarazada de mi ¿no? .-
- Si –se calmó- era tanto para mi, y sentía que nada valía la pena. Me costaba tanto avanzar era como si todo lo que hiciera era mandado lejos. Esperé a que Samuel estuviera un poco mas grande y que tu no necesitaras tanto de mi y –la interrumpí.-
- Nos abandonaste, te fuiste y nos dejaste a un lado –dije.-
- Yo... no quiero que suene así –dijo con la voz temblorosa.-
- pero eso fue lo que sucedió ¿no te das cuenta? –dije aun mas fría.-
- _______, cálmate –dijo mi hermano.-
- ¿Qué me calme? Agradece que estoy hablando y no gritando-miré a Samuel- Hermano, te amo pero... nada va a ser como tu quieres, sé que quieres volver a tener a mamá cerca y que la extrañas quieres que seamos niños de nuevo y que nos cuide como no hizo conmigo –miré a mi madre- ¿por qué viniste? No creo que esta haya sido la razón.-
- No, no lo es –dijo y Samuel abrió sus ojos dejando ver una gran pena- la verdad es que no pensaba volver nunca.-
- Mamá... -susurró Samuel.-
- Su padre... me llamó –nos miró- los anda buscando –tragué saliva sonoramente- no sé donde está pero... preguntó por ustedes, donde viven, donde estudian, si estaban juntos, si estaban con alguien, todo lo que pudiera preguntar. Pero no le contesté y se enojó, está hecho una rabia ahora.-
- Pero... no nos puede hacer nada –dijo Samuel.-
- Busca a _______ -me miró- calculó tu edad y quiere "sacar provecho de eso" aun que sea días quiere aprovecharse de eso, buscará ser tu tutor y... es notorio que se la darán.-
- Mierda –susurré y la miré- pero si no nos encuentra no puede reclamar nada, seguramente está todo un borracho.-
- Mamá –dijo Samuel mirándola fijo- ¿qué mas sabes?.-
- Avisé a la policía pero... nada, ni idea es como si en realidad nunca hubiera existido. Pero... sé que está en Inglaterra, creo que debe estar por Cheshire, tal vez piensa que aun vivimos ahí.-
- No sé tu –dijo Samuel mirándome- pero a mi se me llegaron a poner los pelos de punta.-
- Creo que eh vivido peores cosas de que tener a un borracho que no sabe ni donde está parado buscándome.-
- ¿Peores cosas? –preguntó mi madre.-
- Claro, como nunca as estado presente ni preguntas ni siquiera como estoy no tienes idea. Nunca intentaste recuperarnos –dije mirándola fijo- cuando era chiquita y nadie me hablaba, cuando todas las niñas se reian en el día de las madres de mi, tu nunca dijiste nada. No sabes cuanto tiempo estuve pensando en como decirte toda la mierda que tengo guardada pero ¿sabes? No te la diré porque ni yo sería tan cruel para escupirte de la manera que eh estado deseando.-
- ¿Me odias? –preguntó mi madre.-
- Si –le respondí y miré a mi hermano- pero Samuel a sido para mi todo lo que ni tu ni mi padre fueron.-
- Al menos hubo alguien de tu sangre –dijo mi madre- ahora, terminemos nuestra cena.-
- ¿Irás a la graduación de ____ mañana? –dijo Samuel.-
- Si, y me iré el sábado muy temprano como a las 6 de la mañana, no te preocupes.-
- Ya hiciste lo que tenias que hacer –dije.-
- Eres igual a tu padre –dijo mi mamá y se me heló la sangre- en la forma de ser, eres idéntica a él y en la mirada.-
- Mejor terminemos de comer –dijo Samuel.-
- Es la mejor idea.-


Bad GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora