Querido pelirrojo.
Ayer llegaste tarde pero te vi comer el caramelo y sonreír.
Hasta podría jurar que tus ojos verdes me miraban pero obviamente eran alucinaciones.
Escuché como José te decía que habías enloquecido, quise voltear y ver por mi misma lo que hacías pero no me atreví.
No puedo dar más pasos, esto es imposible.
Por eso, sólo te observaré desde lejos y te hablaré por mis cartas.
Te dejaré de ahora en adelante un caramelo sabor a piña.
Hasta la próxima carta.
Te quiero mi chico de cabello rojo.
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Querido Pelirrojo.[TERMINADA]
ChickLitÉl nunca pensó que ese color impregnado en él, cambiaría sus días. Él nunca pensó que esas cartas se convertirían en una alegria infinita. Ella, por su parte, envío cartas porque quiso confesar lo que ocultaba. Él comprendió, lo que era estar realme...