YOONSEOK (parte 1)

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Título: Porque eres mío.

Pareja: YoonSeok (Hoseok x Yoongi)

Aviso: Suga+piercings+un Hobi muy inocente(????)

Resumen: Hoseok es nuevo en la ciudad, y como a todos, le cuesta hacer amigos. Sin embargo, todo el mundo dice que es mejor estar solo que mal acompañado.

...Él no piensa igual.

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Jung Hoseok siempre había sido un chico muy felíz , de esos que incluso en los peores momentos  portaban una sonrisa optimista en el rostro , siempre viendo el lado positivo pasara lo que pasara.
Sonreía para calmar a su hermana mayor mientras la envolvía en un tierno abrazo y le susurraba "Noona,ese chico era un idiota y me alegro de que hayas roto con él, vamos a ir a comer helado y así te olvidas de ese tonto".
También sonreía cuando algo le salía mal. "Siempre hay más oportunidades, lo haré mejor la siguiente vez", se decía a sí mismo tras suspender un examen importante en el que había puesto todo su esfuerzo.
Sí, Hoseok sonreía constantemente, pero en ese momento el joven de 20 años sonreía con más fuerza y más sinceridad que nunca.
Lo habían aceptado en su universidad  favorita y por fin,tras trabajar un año entero para poder pagarse un pisito algo viejo en el centro de la ciudad, podría terminar sus estudios y pronto ser un médico de verdad.
Mentiría si dijera que dejar atrás a su familia y a su pequeño pueblo no le dolía.
Le dolía, y mucho. No podría quedarse dormido en el regazo de su madre mientras sus oídos disfrutaban plenamente del sonido de las hojas verdes y amarillentas danzar con el viento , ni podría quedarse hablando con su hermana mayor en el tejado de la casa, donde podían observar el limpio cielo oscuro llenarse de bellas estrellas de distintos coloridos tintes.

En la ciudad seguramente no podría ni encontrar dos estrellas en el cielo, sin embargo,mientras sus manos se aferraban a su maleta color carmesí, su mente no pensaba en eso,sino en lo bonita que sería la ciudad por la noche con sus misteriosas luces artificiales, las millones de aventuras que encontraría ahí y las amistades que le estarían esperando.
Su enorme sonrisa lo decía todo.
Jung Hoseok, de 20 años de edad, no podía esperar por vivir cómo sería el día a día solo, en la ciudad, y con infinitas nuevas personas decorando su vida.

°°°°

Dos semanas ya  habían pasado desde la llegada de Hoseok a la gran ciudad, y bueno...Todo iba bien.
Sus clases eran entretenidas y sus profesores explicaban todo con detalle, la comida de la cafetería era deliciosa y el ambiente de estudio era realmente maduro.
Todo iba genial,excepto por el hecho de que no tenía amigos aún .
Ningún amigo.

Ese día, con las manos jugueteando con su teléfono móvil (estaba hablando con su hermana), ocurrió lo que tanto temía.

—Se hará una presentación en grupos de dos sobre este tema, así que prepararlo ya, que el próximo mes quiero ver vuestras presentaciones —el profesor anunció con una sonrisa algo malévola en los labios gruesos.

Hoseok ya estaba internamente temblando.
Miraba a su alrededor con ojitos nerviosos, encontrándose la dolorosa realidad de que todos sus compañeros ya estaban hablando con su pareja de grupo, excepto por...
Un chico de cabello rubio plateado (el único color de cabello claro de toda la clase, como una estrella amarillenta iluminando la oscura noche ),  algo más bajo que Hoseok, de tez blanca como la nieve y labios finos , un rostro casi angelical debido a su apariencia de niño. Un rostro que parecería pertenecer a un angelito si no fuera por aquel piercing que decoraba su labio inferior , los múltiples piercings que adornaban sus orejas y aquellos dinámicos tatuajes que marcaban su cuerpo, desde su cuello delicado hasta sus brazos.
De pronto, sus miradas se cruzaron, y Hoseok sintió una extraña electricidad y calidez recorrerlo de la cabeza a los pies, dejándolo sin aliento.
El joven le sonrió suavemente, sus labios curvándose hacia arriba levemente.
Los dos minutos restantes de clase, el rubio le dio un papel con su número de teléfono a nuestro protagonista y esa vez fue el moreno quien sonrió.

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