Estoy abrazada a mi misma en posición fetal y llorando, sola en el enorme cuarto. Una niña de largos rizos dorados se acerca a mi cama.
-todos los hombres son tontos- me dice con su dulce vocecita- hoy James Roy me ha quitado mis pinturas y no me las devolvía. Todos los hombres son tontos.
Y allí se quedo, encima de la almohada en el cabecero de la cama sollozando todas las cosas que le había hecho James.
La forma que tienen los niños de ver las cosas malas de la vida me hace gracia, pero pienso que esas cosas igual que a mí me hace daño toda esta mierda, a ellos les preocupan sus cosas.
Y así sin más me dijo:
-no dejes que tu James te haga daño, porque algún día le harán eso a él- me dice sonriendo- y colorín colorado Nerea le quita las pinturas a James y este cuento se ha acabado.
Y se va.
Me levanto de la cama con mi calentito pijama de invierno, quito la música triste y pongo una alegre. Enseguida vuelve a aparecer Nerea y bailamos su canción favorita "what do you mean".
Se oye abrirse la puerta del comedor y cerrarse de un portazo. Apago la música y Nerea se va a su cuarto.
- Me cago en la puta Meriem - se oyen platos rotos.
Bajo corriendo y mi padre está a punto de pegarle a mi madre.
- ¡basta! - le grito.
Le suelta del cuello a mi madre y el sube al piso de arriba dándome un pequeño empujón. Corro hacia mi madre que coge los trozos de cristal del suelo y me arrodillo a abrazarla.
- Todo va a estar bien - le susurro - todo tiene un final feliz.
La niña de la portada es la hermana, por si acaso xd
¿os gusta? Decirlo en los comentarios y si recomendáis mi historia os estaría muy agradecida
Graciass pambisitoss
