El se acerca sonriendo. Sus ojos son mas azules en persona. Le da dos besos y se sientan en un banco apartado de todos.
- Eres muy guapa- me piropea.
Me pongo roja y aprieto los labios.
- Tu también- le digo sonriendo.
Creo que no me he reído más en toda mi vida. Nos hacemos fotos y en una ocasión me muerde el labio por accidente, en otra nuestros labios se rozan. Los dos hacemos como si no hubiera pasado nada. Ha sido el mejor recreo de mi vida.
En la clase de física y química no he parado de mirar el reloj. Ignoraba las bromas y los chistes malos que hacia Mario de la profesora. Antes de que sonara el timbre alguien abre la puerta.
- Hola vengo a buscar a Claudia- dice Alex - se que aún faltan 5 minutos...
La profesora me deja ir y antes de salir el me coge de la mano y me giro al ver la cara de Mario pero mi sorpresa es que el está detrás de nosotros. Salimos de la clase y Mario le coge a Alex por el cuello de la camisa y lo empuja hacia las taquillas.
- ¿Qué coño estás haciendo con mi novia? - grita.
- Ex novia - le corrijo.
- ¿Cómo? -me pregunta.
- Me pusiste los cuernos Mario - le grito - ¿enserio crees que soy tan gilipollas como para perdonarte?
No habla, solo me mira con los ojos vidriosos.
- Eso creía - le digo - hasta mañana.
Cojo a Alex de la mano y nos vamos del instituto. Vamos al palacio de cristal del retiro, que, a esa hora no hay nadie.
Nos sentamos en uno de los sillones y nos volvemos a reír como nunca. No me doy cuenta de que mis manos están enredadas en su pelo y las retiro vergonzosamente.