Cap. 20: Mamá Sharon.

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Había pasado una semana desde el casamiento de mamá, hoy día ambos estaban en las playas de Grecia mientras Liam, Ty y yo cuidamos la casota.

- Así que... - Se cruzó de brazos con una sonrisa de diversión en el rostro - Rompió tu culo virginal, ¿eh?

Habíamos decidido, con Sharon, reunirnos en un restaurante para poder almorzan y hablar de la vida.

Digamos que hacia mucho que no nos sentábamos nosotros dos solos con el objetivo de hablar sobre algo... Bueno, no. Ya lo habíamos hecho varias veces pero Sharon se ofreció a pagar el almuerzo y no me pude negar. El problema era que... ella quería hablar sobre mí teniendo sexo con Liam y yo quería comer mis sándwich de pollo.

La niña estuvo toda la semana intentado sacarme información sobre el tema y yo no había dicho palabra.

Me había despertado hace poco y Sharon me envió un mensaje sobre que ella me invitaba el almuerzayuno. Así que me vestí, le deje una nota a Liam diciendo que luego volvía a la casa y que saldría con Sharon. Y fui por Sharon. Así que, aquí estamos.

- Podfria debcirfe - Contesté con la boca llena de mi delicioso sándwich.

- ¿Y qué tal estuvo? - Hizo bailar sus cejas emocionada. Metí otro bocado en mi boca mientras pensaba una palabra, para describirlo.

- Azkemvaska.

- ¿Asqueroso? - Levantó una ceja confundida.

- Na, A-sam-baska.

- ¿A... Saaaaaa...? - Balbuceó intentando adivinar. Vamos, no era tan difícil. Rodé los ojos mientras terminaba de tragar.

- Asombroso, S. Fui increíble, inolvidable - Chilló emocionada.

- Dios, mi negra sé ha convertido en una mujer. Ay - Fingió limpiar una lágrima y se llevo su hamburguesa a la boca.

- Eres una exagerada.

- Oye, no se pierde la virginidad del culo todos los días, hombre. Sucede una vez en la vida y a ti te sucedió hace una semana - Dijo una vez que término de tragar. Volví a rodar los ojos.

- Él... También dijo... Dijo... Esto. Él...

- ¿Le gusta hablar sucio?

- ¿Qué? No. Bueno, no lo sé. Él, dijo...

- ¿Qué te dijo? - Preguntó mientras se llevaba el sorbete de su gaseosa a la boca.

- Que me amaba.

Su mandíbula cayó acompañada de la gaseosa que tenía en la boca y que empapó la mesa.

- Él dijo... ¿qué? - Levanté una mano llamando al mesero. Un chico se acerco con un trapo y comenzó a secar la mesa.

- Lo siento, es retrasada. Hace poco salio del hospital, no lo hace al propósito - Sharon rodó los ojos.

- Entonces... Oh dios... - Comenzo a hiperventilar y se abanico con ambas manos - ¡Mierda, se aman! ¡Sophie jamas me dijo que me ama y somos novias! ¡Y ustedes no! - Comenzó a gritar como psicótica y el pobre chico se le quedo mirando raro antes de alejarse rápidamente.

- Nosotros no necesitamos ningun tipo de etiqueta para demostrar nuestros sentimientos - Le enseñe la lengua juguetonamente y ella volvió a rodar los ojos mientras sonreia.

- Luego te llevare por un regalo. Te encantará.

Una malévola sonrisa se extendió por su rostro y yo conocía demasiado bien a Sharon como para saber que esa sonrisa no traía nada -nada- bueno.

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