¿Tu y el?

Capítulo 7: La pedida

Lo del cine se que fue un poco una locura, pero me gustó.
Al día siguiente era sábado por la tarde y fuimos a ver un partido de fútbol los dos.
Cuando lo estábamos viendo metieron un gol y el se levantó tan bruscamente que yo pegué un respingo y el se empezó a reír.
Cuando estaban en el descanso del partido, me miró y me dijo que me tenía que decir algo. Se puso de rodillas y me cogió la mano, si, como si fuera a pedirme matrimonio, pues bien, me dijo:
Brad: - Lily, ¿te gustaría ser mi novia?
Por un momento me quedé callada, hasta que le dije:
Lily: - Nada me haría más ilusión.
Y sus ojos se inundaron en lágrimas.
Me dio un beso en la boca y nos fuimos, aunque el partido ni había terminado. Pero nos daba igual, con tal de estar juntos.
Fuimos a un parque para niños en el que no había nadie y nos pusimos a hablar y a decirnos muchas cosas bonitas. Me dijo que esperara un momento, fue al coche y venía con las manos detrás de la espalda. Se acercó y me dijo:
Brad: - Te quiero, más que a mi vida entera, y se que llevo poco tiempo conociéndote pero desde que te vi, supe que fue amor a primera vista, y espero que nada cambie eso.
Y me dio un ramo de flores precioso.
Lily: - Nunca nadie me había dicho algo tan bonito como eso.
Brad: - Pues mereces que te lo digan todos los días de tu vida.
Lily: - Nunca pensé que podría llegar a sentirme también en un mismo día.
Brad: - Dejame decirte todo lo que siento al verte. Me siento tan fresco cómo una rosa, te veo y me entran mariposas en el estómago, y tu siempre tan guapa que ni me salen las palabras y me pongo nervioso al verte.
Lily: - No se ni que decir, tu siempre te portas tan bien conmigo, me ayudas en todo, eres tan cariñoso y tan guapo que me quedo en blanco al verte. Te quiero.
Brad: - Te quiero.
Nos besamos y desde ese momento supe que el era para mi.