Key's sick [JongKey]

Capítulo 1.

~JongHyun~

-Buenas tardes, soy Kim Jonghyun y al parecer soy su nuevo vecino - sonrío el de pelo grisáceo a un chico alto que se encontraba parado en el marco de la puerta que anteriormente había tocado.
-Hola, Dongwoon- respondió sin ganas el castaño, no abriendo por completo la puerta de su casa.
-Ehh... bueno yo... venía a presentarme y a traerles este presente de mi parte - alzo en sus manos un pequeño recipiente con pay de limón -Lo hizo mi madre - mostro una sonrisa forzada y espero a que el alto la tomara, asustándose al escucharlo gritar.
-¡Kibum! ¡Ven de inmediato! - le hablo a alguien, llegando el nombrado segundos después agachando la mirada y situándose a un lado del alto. -¡Eres tan lento y estúpido!
-Lo siento Dongwoon - susurro pasando saliva, alzando un poco la vista y haciendo que choque con la de Jonghyun.
-¡¿Qué estas esperando?! ¡Toma lo que trajo el vecino! - volvió a alzar la voz y de inmediato el castaño tomo el pay de las manos de Jonghyun, susurro un quedo "Gracias" y giro yéndose con el postre en sus manos, perdiéndose de la vista del mas bajito -Ese es Kibum, mi novio - decía con bochorno y rodando los ojos en señal de fastidio lo último, cerrando Dongwoon la puerta en sus narices sorprendiéndolo por la acción tan grosera de su parte, así que sin más dio la vuelta y regreso a su casa, ya tendría después tiempo de entablar una conversación con su vecino.
-¿Qué tal te fue con los vecinos hijo? - cuestiono su madre al verlo entrar y notar como sin ganas se dejaba caer en el sofá -Parece que no tan bien. - suspiro y se fue de la casa de hijo, alegando lo visitaría tan pronto volviera a tener tiempo.
Una vez su madre lo dejo solo encendió la televisión y al no encontrar ningún programa que llamara su atención decidió apagarla, se levantó y busco un disco para colocarlo y escuchar un rato música mientras se preparaba o más bien calentaba algo de lo que -lo más probable- su madre hubiera hecho de comer...
Todo quedó en silencio...
Lo escucho...
Fuertes gritos se escuchaban, así que se quedó así, en silencio unos segundos más esperando que solo haya escuchado mal, pero de nuevo se escuchó un grito por lo que en lugar de poner música dejo sus discos en la mesa de centro de su sala y se acercó a la pared que colindaba con la de su vecino, no quería ser chismoso, ni nada parecido, pero estaba seguro que ese chico castaño Kibum -si bien recordaba- solo era la victima del castaño, oyendo claramente como el tal Dongwoon insultaba con todas las palabras altisonantes que conocía o había escuchado alguna vez dirigidas únicamente al chico que era su novio... ese hermoso chico de una mirada tan pura y sincera, lindos labios rosas y blanca piel
-¡Por todos los dioses que existan! No puede ser... - susurro agarrando con sus manos su cabeza en un acto exagerado -Me enamore a primera vista.

Un grito nuevamente...
Sí, claramente eso había sido un grito...
No podía quedarse de brazos cruzados, debía de hacer algo, pero... ¿qué? Sabia de sobra que si le preguntaba al castaño, él negaría todo... porque si el alto lo maltrataba lo más seguro es que también lo tendría amenazado.
Pero ¿y si solo se había confundido o algo por el estilo? Bueno podría ser, además él no era nadie para estar criticando lo que hacían sus vecinos, no tenía por qué meterse en esos temas que de ninguna manera le inmiscuían, si sus vecinos discutían ese era muy problema suyo, aunque... ese chico había movido algo dentro suyo que lo hacía sentir... extrañamente bien...
Ignoró y desecho todas las ideas que pasaban por su cabeza de ir de nuevo con su vecino y subió a su habitación sacando ropa limpia y una toalla para darse una ducha, saliendo varios minutos después ya listo para dormir...

A la mañana siguiente despertó tarde, podía darse ese privilegio, mientras no tuviera nada que escribir para los artistas de moda, no tendría porque preocuparse... Así que si, era escritor y varias veces también componía la música para las letras que él mismo escribía y que los artistas del momento pudieran cantar.
Bajo a la sala sentándose en uno de los sofás encendiendo la televisión y buscando algún programa que le interesara... Al poco rato su estómago rugió por algo de comida, pues ya era algo tarde, se levantó del sillón y camino a la cocina, notando no había más que lo que su mama cocinó el día anterior, por lo que lo calentó en el horno de microondas y se dispuso a comerlo de manera rápida para ir después al centro comercial por cosas para su alacena.

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Algunas horas después se hallaba en una tienda comercial, buscando en los pasillos pastas, comida enlatada, y demás cosas que pudiera preparar, pues no era un buen cocinero... Caminaba a paso lento por el pasillo notando al final de este una rubia cabellera, intentando reconocer a la persona comenzó a caminar en dirección a esta.
-

¿Kibum? - interrogo ya cerca sintiendo su corazón se aceleraba al verlo de cerca perdiéndose en lo blanco de piel, en sus felinos ojos, sus rosas labios con forma de corazón, suspiro y sonrió de manera amplia el chico cambio el color de su cabello, se veía simplemente hermoso con ese rubio cabello...-Soy Jonghyun, tu nuevo vecino, ayer fui a llevar un pay... - explicaba al chico una vez que obtuvo su atención, extendiendo la mano para que el -ahora- rubio la tomara notando no lo hacia, por lo que la bajo.
-El postre estuvo rico, gracias... - le sonrió algo forzado y se dispuso a continuar con las compras.
-¿Podríamos terminar de hacer las compras juntos? - interrogo siguiendo al chico por el pasillo -La verdad es la primera vez que estoy tan solo, por lo que no se que podría comprar... - mintió, pues llevaba ya varios años que vivía solo, era cierto que algunas veces en su anterior departamento su madre le hacia las compras de la despensa, pero él si sabía lo que debía comprar.
-No... - respondió de manera seca intentando ignorar al de pelo grisáceo, que aunque quisiera decir que si, no podía.
-¿O podemos regresar juntos? De todas formas vivimos a un lado del otro, traigo carro y... - intento de nueva cuenta, no entendía porque pero necesitaba estar al lado de ese rubio chico que a pesar de haberlo visto el día anterior ya le gustaba.
-No... - de nuevo esa respuesta, así que sin ganas, Jonghyun se dio por vencido.
-De acuerdo, nos vemos después - volvió a sonreír y siguió con sus compras yendo a otro pasillo para buscar lo que le faltaba.

Por otro lado Kibum apretó entre sus manos la lata de verduras que había tomado, intentando hacer que su mente dejase de pensar en ese chico, recordando que debía pensar en algo para que Dongwoon no pensara mal de él como siempre lo hacia.