7: "Recuerda, solo es un mal día no una mala vida" [Editado]

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—Harry— susurró levemente el castaño y el ruloso levantó su rostro el cual quedaba a escasos centímetros del de Louis.

El castaño miró los ojos cristalizados del rizado y su nariz rosada. Pareció su imaginación pero al verlo así, pareció oír cómo algo se rompía en su interior, entonces pudo entender.

No le gustaba ver a su amigo así, mucho menos a Harry y no entendía el motivo. Había visto a su amigo rubio llorar, aquella vez en que Niall animadamente lo había invitado a ese restaurante de pollo que tanto frecuentaba el rubio. Y al llegar habían descubierto, con sorpresa, que lo habían clausurado permanentemente; y, no sólo esa franquicia, sino todas las de la ciudad.

Entonces Louis tuvo que cargar con los lloriqueos y cambios de humor su amigo rubio por casi dos semanas, hasta que encontró otro restaurante favorito, que hasta ahora sigue frecuentando.

Louis también había visto llorar a su amigo Zayn, aunque éste no lo quiera admitir. Pero el castaño lo vio destrozado y llorando cuándo descubrió que Niall tenía novio. Eso había ocurrido en la preparatoria, se había encontrado al moreno debajo de un árbol y había escuchado atentamente toda la historia de su amigo. La cual contaba que desde secundaria se había enamorado de ese imperativo, comelón y poseedor de tan hermosos ojos azules. Louis como mejor amigo le dio consejos y apoyo. Y el moreno pudo seguir adelante... aunque no de la forma que Louis pensaba.

Ya que en la hora de la salida, Zayn golpeó al chico y se llevó a Niall, sí. El castaño se preguntó, qué clase de amor sería ese. Aunque eso ya no le importaba, ahora estaba feliz por sus amigos, que no hace más de un año, ya habían considerado contraer matrimonio y así lo hicieron.

Pero... aún no lo entendía, después de haber vivido y recordado todas esas experiencias, el dolor y la nostalgia que sintió en esos momentos no se comparaba a lo que estaba sintiendo en éste momento al ver a Harry así, era mucho más intenso y de nuevo se preguntaba, ¿Por qué?

—Harry— susurró el castaño intentando separarse por segunda vez, pero el rizado era verdaderamente fuerte.

— ¿Te quedarás conmigo?— preguntó susurrando Harry, el castaño sintió el cálido aliento del ruloso en su rostro debido a la cercanía que estaban experimentando.

—No puedo, tengo que irme ya— respondió Louis

Harry observó la mano herida del castaño y la sujetó suavemente— ¿Te duele?

—No, el dolor fue leve y ya pasó.

—Lo siento.

— Sé que lo haces.

—Perdóname.

—Yo-o...— Louis comenzó a tartamudear, ¿Realmente podría perdonar a Harry?— No sé si pueda hacerlo.

—Los amigos se perdonan todo, sabes?— dijo el rizado.

—Los mejores lo olvidan y superan— pronunció el castaño.

— ¿Mejores amigos?— preguntó Harry tratando de sonreír.

—Mejores amigos...

—Hoy y...

—Siempre— finalizó Louis

— ¿Vendrás por mí?— preguntó el rizado.

—No puedo asegurarte nada— contestó Louis

— Por favor— pidió Harry.

Louis caminó hacia la puerta ignorando las súplicas de Harry, pero se le hacía tan difícil.

—Louis...

—Volveré, te lo prometo.

Fue lo único que Harry pudo escuchar de su amigo antes de que abandonara la habitación. ¿Mejores amigos, ah? No suena tan mal. El rizado se tumbó en la cama, ¿Qué había hecho? Se había familiarizado más con Louis.

Sabía que eso le traería más consecuencias.

Siempre había evitado hablar con extraños, y ahora ¿Qué sucedió? Habló con uno, socializó, y qué consiguió? Encariñarse, además de que había vuelto a un manicomio. Aunque no sabía si era mejor que estar en la calle.

•••

Louis suspiró, ya había pasado una hora desde que había visto a Harry, y este extraño sentimiento de volver a verlo de nuevo, no dejaba de molestar e incomodarle. Había comenzado su clase de química, una de de sus favoritas.

—Tomlinson.

Louis levantó la cabeza, y dejó a un lado su cuadernillo y lapicero—¿Si?

— ¿Podría decirme en qué año se descubrió el átomo?— preguntó la profesora acomodándose las gafas.

—Hm... ¿En el año 4.000 A.D.N?

— ¿Podría decirme quién fue el descubridor de esa materia?

—Demócrito— contestó Louis con seguridad.

La mujer volvió a la pizarra— Bien, como les decía, un átomo es la base...

Louis regresó su vista a su cuaderno y con su lápiz volvió a bocetar. ¿En qué se había metido? Hace apenas un día, tenía su vida típica, aburrida y solitaria. Pero ahora... se había involucrado con un asesino, con un enfermo.

Pero por una extraña razón, por más extraño que suene, en su interior no se arrepentía de haber chocado con Harry esa noche bajo la lluvia, no se arrepentía de haberlo invitado a su casa.

¿Por qué? Ni él mismo sabía. Pero estaba seguro que encontraría una respuesta.

El sonido de la campana sonando le había indicado que la clase había terminado, sólo faltaba una más y podría ir a trabajar, mejor aún, podría volver a ver a Harry.

En el transcurso de la hora, Louis pensaba sobre lo que había logrado en su vida, había llegado a la conclusión de que no había sido mucho. Sin duda tenía una patética vida, cuándo niño siempre había anhelado tener una aventura, ya sea perderse en el bosque y de pronto traspasar una especie de campo mágico que lo lleve a un mundo de fantasías. Pero eso sólo eran cuentos de niños, ahora tenía una vida realmente, tenía responsabilidades y preocupaciones.

Louis bufó mientras se echaba en el asiento, y notó una escritura que estaba pintada en la pared del salón. ''Recuerda, es sólo un mal día. No una mala vida''. El castaño sonrió, después de todo, aquella frase tenía razón.

Podría ser un día ajetreado, pero vendrían muchos más por delante, después de todo, su vida apenas comienza.

†Esquizofrenia† {Larry Stylinson} [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora