†Esquizofrenia† {Larry Stylinson} [Editando]

8: "Madness" Pt.1 [Editado]

{Mirad la foto multimedia, el chico de pelo azul es Joey}

— ¿Que pasó, Niall?— preguntó Louis dándole su mochila al rubio y apresurándose a caminar.

—Nadie lo sabe, sólo comenzó a gritar y a romper cosas de la nada— contestó el rubio colocándose la mochila del castaño para avanzar con más facilidad.

Los dos jóvenes acompañados de dos enfermeros más se apresuraron hasta la habitación de dónde provenían aquellos gritos.

— ¡Joey!— gritó Louis abriéndose paso entre los doctores y enfermeros. El castaño golpeó la puerta dos veces— ¡Joey! ¡Soy yo! ¡Tu amigo Louis!

El rubio miró a su amigo castaño con preocupación— ¿Y si de nuevo intentó suicidarse?

—No lo creo. ¿Las llaves de la habitación? ¡¿Quién las tiene?!— exclamó Louis alterado, conocía muy bien a su paciente Joey. Y que este estuviera dentro de una habitación sólo y encerrado, le preocupaba de una cierta manera.

—Joey— respondió Zayn.

— ¡¿Joey?! ¡¿Cómo es eso posible?!— volvió a exclamar el castaño, aún más alterado.

—Escucha Louis, no es momento de explicaciones, el tipo se ha encerrado con unas tijeras, no sabemos de dónde rayos las sacó. Ni sabemos de dónde carajo consiguió las llaves— comenzó Niall a levantar los brazos mientras su tono de voz de voz comenzaba a sonar alterado— No hay repuesto de llaves, lo sabes.

—Tranquilo— intentó calmarlo el moreno.

Más gritos comenzaron a oírse desde adentro.

— ¡¿Qué hacen aquí?! ¡Vayan por una silla! ¡Por un bate! ¡Cualquier cosa que nos pueda ayudar a tumbar esta puerta!— exclamó Louis.

Los dos enfermeros acompañantes salieron en busca de lo pedido, mientras que sólo quedaron Louis y sus dos amigos.

— ¿Hace cuánto pasó esto?— preguntó Louis con nerviosismo.

—Hace poco, minutos antes de que tu llegaras— respondió Zayn.

— ¿Y, no hay razón alguna de su comportamiento?— preguntó una vez más el castaño.

Niall negó con la cabeza.

—Pero...— el moreno se quedó pensativo.

— ¿Pero...?— continuó Louis.

—En la hora de receso vi al demente con Joey— respondió Zayn mirando con soberbia una habitación que no quedaba muy lejos. La habitación del rizado.

— ¿Qué insinúas? ¿Que Harry le habrá hecho algo?— preguntó el rubio. La puerta de la habitación se abrió haciendo retroceder a los tres chicos.

—Tommo...— susurró el chico en la puerta. Louis observó al joven, se veía devastado. Tenía sus ojos hinchados y lágrimas aún caían de ellos. Su cabello largo y azulado estaba despeinado. El chico poseía unos grandes ojos grisáceos, tan claros como el agua, como si fueran transparentes y su pupila fuera lo único que resaltara.

— ¡Tommo!— gritó el chico de cabello azul, lanzándose hacia Louis, para rodear sus brazos en el cuello de Louis en un abrazo.

Rick y Michael, los enfermeros, habían venido ya con un bate pero se quedaron sorprendidos al ver que Joey ya había salido de su habitación y se encontraba en un amoroso, si así se podría decir, abrazo con Louis.

— ¿Hasalido por sí solo?— preguntó el pelinegro mirando a Zayn.

—Sorprendente, ¿no?— rió Zayn.

—Sí— contestó el pelinegro, Rick.

—Será mejor que dejemos que Tomlinson se encargue de esto, ¿no creen?— preguntó Michael.

—Sí— respondió Niall.

Los hombres abandonaron el pasillo y dejaron a Louis con el chico, el cuál seguía pegado a él.

—Joey— le nombró Louis separándose de él.

— ¿Por qué te separas? ¿Es que ya no te gusta abrazarme?— preguntó el chico asustado.

—No intentes de hacerme olvidar por qué estoy aquí, Joey— respondió Louis.

Joey lo miró desconcertado— ¡Estás serio conmigo! ¡Estás enojado!

— ¡Sí, estoy bastante enojado!— gritó Louis, el castaño le tomó las muñecas al azulado y le quitó las tijeras que tenía en una de sus manos— ¿Por qué las has tomado? ¡Sabes que está prohibido que los pacientes tomen este tipo de cosas! ¡Mira lo que has hecho, te has cortado los brazos!

El chico comenzó a temblar asustado— ¡Eres como ellos! ¡Me estás gritando igual que ellos!— Joey tomó a Louis por los hombros y le arrebató las tijeras.

Louis ablandó su semblante, Joey tenía razón. Le estaba gritando y él jamás le había gritado a uno de sus pacientes, ¿Entonces por qué lo hacía ahora?

—Lo siento Joey, lo siento mucho, nunca quise gritarte— habló el castaño mientras se acercaba lentamente.

El chico de ojos grises lo miró enojado y se metió a su habitación, Louis se adelantó y corrió a entrar con él.

—Dime Joey... ¿Por qué te has encerrado?— preguntó calmadamente Louis de pie frente al azulado.

—No lo sé, sólo pensé que... sentir de nuevo dolor me haría bien— susurró Joey mientras se dirigía hacia su cama y se acurrucaba entre las sábanas.

— ¿Por qué el dolor nos haría sentir bien? Es... dolor, el dolor no nos hace bien.

—Pero nos hace fuertes.

— ¿Y tú eres fuerte Joey?— preguntó Louis acercándose a la cama

—No— susurró el chico enterrado entre todas esas mantas y almohadas de rayas.

Joey cerró los ojos, los recuerdos abrumadores llegaron a atormentarlo una vez más, gracias a esas heridas de dolor que se había ocasionado. Louis suspiró y acercó su mano decidido a quitar esa manta que tapaba a Joey, pero cuándo menos se lo esperó el chico de ojos grises se había levantado y había sujetado la mano de Louis tirándolo junto a él. Joey había rodado por la cama, quedando sobre Louis, con sus piernas a cada costado y tenía sus muñecas firmemente sujetas con una sola mano, evitando cualquier posible salida, con la mano desocupada sujetaba las tijeras; y con esos ojos claros miraba sin ninguna expresión al castaño.

@ 0VS