Y el destino llegó (Harry Styles y tú) (CORRIGIENDO ERRORES)

Capitulo 15: La fiesta de Louis

Narra Harry

"No lo puedo creer"

Estaba en el coche, rodeado de cientos de fans y periodistas y, aun así, sentía que estaba en otro mundo apartado de éste, en mi propio mundo. Ese beso tan deseado y que tanto había esperado llegó, y de nuevo, fue ella quién me lo dio. Ahora me debía dos besos

Siempre recordaría ese beso tan especial para mí. Su olor a Lady Rebel Black, sus labios con sabor a vainilla, sus ojos antes y después de besarme... Y esa frase, "Acabas de enamorarme, Styles". Jamás olvidaría esa frase. Ese momento fue el más especial y perfecto de toda mi vida. Lástima que me quedara parado y sin reaccionar. Me hubiera gustado poder devolverle el beso y no dejarla salir del coche hasta que me quedase sin más aire. Pero, como siempre, me quedé bloqueado ante ella. Siempre me pasaba cuando una chica me besaba, y eso no había cambiado con el tiempo. Por eso, procuraba ser yo el que besaba primero, para no quedar como un tremendo idiota delante de ella. Justo como lo que acababa de hacer. De pronto, vi a Paul que entraba en el coche

-Paul, ¿ella....?

-La he dejado en el ascensor, sana y salva -me interrumpió- ¿Tranquilo?

-Sí, y gracias

Cuando me llevó a casa, me fui directo a la cama y me tumbé boca arriba. Pensaba en todo lo que había ocurrido esta noche. Pensaba en cuando la vi en el almacén, en su cara cuando empezamos a cantar, en cuando me acerqué a ella sosteniéndola de la cintura y le canté "Irresistible"... en ese beso. Me quedé dormido pensando en ese beso, queriendo volver a revivirlo de nuevo

Narra _____

Me desperté con el sonido del timbre. Tenía sueño y no quería levantarme de la cama, pero es que estaban aporreando la puerta. Y eso me ponía más irritable. Al final, me levanté y fui a abrir

"¿Quién narices será?"

Cuando avrí la puerta, me encontré a una preciosa morena con un vestido floreado. Era Danielle.

-¿Qué haces en pijama? -fue lo primero que dijo nada más verme

-Buenos dias a ti también, Dani

-Venga, ve a vestirte -me ordenó. Era una mandona

-¿Por qué?¿Qué pasa?

-No te acuerdas, ¿verdad? -me quedé en silencio pensando en qué tenía que hacer. Danielle me lo recordó de todas formas- Habíamos quedado para comprar los vestidos

"Mierda, se me habia olvidado"

-Pasa y ponte cómoda -la dejé entrar del todo y no sólo en la entrada- Yo tardo poco en vestirme. Estás en tu casa

-Sí, ya... Eso decimos todas -murmuró entre dientes

Fui directa al armario. No me entretuve mucho. Cogí unos vaqueros de pitillo, una camiseta blanca básica, una pequeña chaquetita beige y mis converses rojas. Luego cogí de mi tocador un anillo rojo y un pañuelo del mismo color. Me fui al baño y me puse rápidamente una sombra de ojos rosa, me delineé un poco los ojos, y me eché un poco de máscara de pestañas y colorete. El toque final fue un brillo de labios sabor vainilla. Ya estaba lista para salir

-Ya está -dije saliendo del baño

-¿Ya?¿Cómo lo haces? -Danielle se sorprendió- Estás guapísima, y en menos de 10 minutos

-Es algo que se va perfeccionando con el tiempo -las dos nos reímos

Pero, antes de irnos, sonó de nuevo la puerta

-Dani, ¿puedes abrir tú? -le dije yendo a mi cuarto- Yo voy a por el bolso

-Claro

Después de organizar mi bolso salí del dormitori y ahí estaba. Ese hombre que me hizo sentirme en el séptimo cielo ayer. Que todavía lo hacía. Ese hombre que hacía que mi estómago estuviese en una montaña rusa. Harold Edwards Styles Cox.