Ese día, dentro de muchos,
fue muy especial.Fue la primera vez que hablamos en persona, y por obvio, me puse nervioso y la respiración se me agito repentinamente delante tuyo.
Al parecer lo notaste, púes me abrazaste y en vez de agitarme un poco más me tranquilize.
Todo se calmo de un momento a otro, púes, una sensación desconocida me embargaba por completo al contacto con tus brazos
ESTÁS LEYENDO
Tanto en ti
Short StoryAquí quedará aquella historia, secretos, cartas, pensamientos y amor que sólo tú me has hecho llegar a sentir...