Una carta a mi mejor amigo |Jos Canela|

#8

Lo siento mucho.

Narra ____.

Salí de mi casa rumbo al lugar en el cual me vería con Jos, mi madre me había estado insistiendo en que no saliera muy tarde. Pero a quien engaño jamás le hago caso a mi madre, como decía estaba a unos cuantos pasos de el lugar.

Cuando del otro lado de la calle veo a Jos sonriendo, con una docena de rosas en las manos. El aire se me escapa de los pulmones y con toda seguridad cruzo la calle, pero no me di cuenta que venia un hombre borracho a máxima velocidad y este acaba con todo.

Narra Jos.

La vi desde el otro lado de la calle, como siempre se miraba hermosa. Sus ojos cafés, su linda sonrisa, se cruzó la calle y yo la esperaba con los brazos abiertos desde el otro lado, pero jamás llego. Me asuste y mire su cuerpo en el suelo rodeado de un charco de sangre.

Ese inepto hombre borracho, venia con máxima velocidad. Ese hombre puede arrebatarme al amor de mi vida, salí corriendo a su lado.

—Jos. Te amo —dijo con la mayor dificultad de el mundo.

—Yo también te amo ____—dije llorando— ¡Alguien llame a una ambulancia! —grite mirando a las personas que se aproximaban y no decían nada.

—Siempre te he amado Jos —dijo ella casi se cerrando sus ojos.

—Quédate conmigo —dije y le di un beso.

Si, le di nuestro primer beso. El beso en el cual eh estado pensando por mucho tiempo y jamás pensé que ocurriría de esta manera.

— ____, no te puedes ir. No ahora, quiero que tengamos muchos hijos y con ellos comamos muchos chocolates, quiero pedirle permiso a tu madre para ser tu novio, quiero conocer a tu padre, quiero llevarte donde mis padres, te amo —dije y llego la ambulancia.

Solo esperemos que ella este bien y no le pase nada.

[...]

—¿Como esta? —preguntó Alonso sentándose a mi lado mientras me daba un café.

—No lo se, los doctores aun no dicen nada —dije llorando.

—Miren ahí viene uno -dijo Alan.

—Familiares de la señorita Williams —dijo eso y todos nos levantamos, mientras el doctor nos miraba confundidos ya que éramos 6 personas—De la señorita _____ Williams —dijo y todos asentimos.

—Yo soy su madre —dijo Marissa.

—Lo sentimos mucho, ella falleció antes de llegar al hospital —dijo el doctor mirándonos con tristeza y en ese momento mi mundo se callo.

Me tire al suelo y comencé a llorar descrontoladamente.

—Ella esta bien, no puede estar muerta. No ____ no yo la amo y tenemos que vivir una vida juntos —dije gritando mientras lloraba en el suelo.

Los chicos intentaban calmarme, pero nadie podía. En ese instante, mi vida se murió con ella, con el amor de mi vida, mi _____.