Aplastapulgares es una de las torturas más antiguas y simples.
Si bien se usaron diferentes dispositivos mecánicos para llevarla a cabo, la tortura en sí consistía en el aplastamiento de uñas, falanges y nudillos en forma lenta y progresiva, extendiendo el dolor durante días sin provocar daño mortal a la víctima.
El nivel de desgarramiento podía ser controlado hasta el punto de provocar prácticamente la mutilación del miembro.
Para los crímenes graves generalmente la tortura se hacía lentamente, comenzando por las uñas, luego pasando a las falanges y terminando en los nudillos, destrozando así ambas manos completamente.
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Instrumentos de tortura
RandomEsta es una recopilación de los instrumentos que de utilizaban por la iglesia en la época medieval.