El fin del caballero ladrón

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El siguiente material fue extraído de las notas de Trilby, uno de los operadores de campo de la PTE (Proyecto de Talentos Especiales) cuyo nombre real permanece clasificado.

"Fin del juego"

O eso pensé mientras estaba ahí parado viendo como la mansión DeFoe se colapsaba en las llamas. Se había terminado.

Esos cinco días nos costaron a todos muchísimo. Phlip y A.J pagaron con sus vidas. Ellos fueron los afortunados.
Jim Fowler fue expulsado de la escuela por las faltas ocasionadas creyendo que lo que pasó en la mansión solo era una excusa. Gran futuro le esperaba.
Simone Taylor empezó a tomar. Sus programas se volvieron malos y sus ojos perdían brillo... eran menos cálidos. Pronto desapareció de las pantallas de televisión.
En cuanto a mi, yo traté de regresar a mi viejo trabajo como un ladrón, pero ya había sido manchado por el tiempo que pasé en esa casa. Mis memorias de la posesión regresaban a mi en forma de pesadillas y cada noche me imaginaba que estaba parado ahí de nuevo en la mansión viendo desde unos ojos no familiares como Philip moría en mis manos. Me convencí entonces de que John DeFoe no estaba descansando en paz y que algún día regresaría a buscarme. Estaba tan asustado de los enemigos invisibles que olvidé los tangibles.

Dos miserables años después de la mansión DeFoe, un montón de golpes me enseñaron una lección dura de la realidad despertándome en una sucia celda la cual creí que sería mi nuevo hogar.

Pero luego él llego. Un hombre del gobierno con una sonrisa nerviosa me ofreció una alternativa, el PTE (Proyecto de talentos especiales).
Hubiera preferido morir antes que tener una obligación con alguien, y mucho menos del gobierno. ¿Enserio la mansión DeFoe me había cambiado tanto?
Aún así dejé todo mi pasado atrás y accedí a todo lo que me decían mis superiores y pasé un año completo completando tareas, desarrollando contactos y creando una buena reputación... pero luego el pasado me alcanzó.

Aún así dejé todo mi pasado atrás y accedí a todo lo que me decían mis superiores y pasé un año completo completando tareas, desarrollando contactos y creando una buena reputación... pero luego el pasado me alcanzó.

En el verano de 1997 me preocupé por la salud mental de Simone Taylor, pues los periódicos habían reportado que últimamente había sufrido muchos colapsos y se había convertido en una reclusa virtual.
No tenía idea si mi apariencia la ayudaría o empeoraría su situación, después de todo le había hecho creer que yo había muerto en la mansión, aunque lo más seguro es que ya supiera la verdad pues mi arresto salió en todos los periódicos y en las noticias, y esperaba que no estuviera molesta conmigo. Además, ver a una vieja amiga pensé que me resultaría benéfico. Así que llegué al edificio de apartamentos donde ella estaba viviendo y pregunté por su habitación encontrándome entonces fuera de la puerta de su casa en una noche tormentosa.

Aún dudaba en tocar su puerta pero después de varías preguntas a mi mismo me decidí por tocar.

Nadie respondía. Volví a tocar.

Seguía sin haber respuesta.

Comenzaba a preocuparme pues el guardia de los apartamentos me dijo que ella había entrado a su departamento, tal vez estaría inconsciente por alcohol, así que decidí usar una ganzúa para forzar la puerta. Sabía que estaba haciendo mal pues esto dañaría nuevamente mi imagen, pero no me importó.

Al entrar, la luz del cuarto de Simone no podría encenderse, estuve un rato parado en la obscuridad. La luz de los relámpagos impedían que mis ojos se ajustaran.

Abrí las cortinas para pudiera iluminarse un poco el cuarto a la llegada de algún relámpago. Aveces no puedo entender porque tengo tan mala suerte...
La luz de uno de los relámpagos me dejó ver el cuerpo de Simone tirado en el piso y lleno de sangre, inmediatamente retrocedí un poco y me tomé de las cortinas evitando el vomitar por los recuerdos que me llevaba consigo verla ahí. Llamé a una ambulancia por inútil que pareciera y me fui antes de que llegaran.

Como yo era un sospechoso del asesinato me suspendieron del trabajo por esa semana hasta tener pruebas, así que recurrí al ministerio de ocultismo para investigar el departamento y confirmar actividad sobrenatural.
Mis superiores al mismo tiempo se disculparon conmigo al ver que había sido declarado inocente de los cargos del homicidio de Simone y me asignaron a investigar si había una conexión con los hechos de la mansión DeFoe. Simplemente con leer esas palabras en mayúsculas en ese archivo me regresaron las pesadillas con más intensidad que nunca.

Como era de esperarse, un agente de campo reportó que varios ladrones habían descubierto y vendido artefactos de la mansión que fueron rescatados después del incendio, incluyendo el ídolo de madera que tenía el alma de John. Para mi sorpresa no se había reportado ningún asesinato de las personas que habían tenido contacto con el objeto. Esto no me calmó para nada.De inmediato le avisé a Jim que se escondiera. El se sorprendió por mi llamada pero él accedió, el chico parecía seguir teniendo sentido común y aún respetaba mi juicio.

Cuando terminé, comencé a seguir el rastro del ídolo viendo entonces que desde una tienda de empeño lo había adquirido un profesor de nombre Abed Chahal, un historiador.Él había creado una feria o algo así en el hotel Clanbrown en una isla en la costa de Anglesey, muy popular de entre turistas.

Tomé entonces el rol de un cazador de antigüedades, investigué sobre el profesor Abed, encontrando que se encontraba en sus 50 años de edad y era bastante despistado. También encontré información de varios lugares que él había visitado, pues tenía un plan para que él me pudiera vender el ídolo.Mi plan era mentirle, haciéndome pasar por un viejo amigo suyo con un nombre falso. Esperaba que funcionara. Tomé mis cosas y por medio de una llamada reservé una habitación.

El 28 de julio de 1997, tomé un ferry (transbordador) desde Bull bay en Anglesey y llegué al rededor de las 3 pm a la villa en la costa del hotel.

Parecía un lugar pacífico, y a diferencia de los estereotipos, los locales eran muy cálidos, y no me contaron ninguna leyenda local para evitar que explorara la isla. El hotel Clanbrown se encontraba en el centro de la isla rodeada por un bosque. Llegué ahí a pie.






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