Ayudame a Olvidarte.

Capitulo 7.

Emily trataba de alejarlos pero no podía, era como si ambos siempre hubieran querido golpearse.

Los otros amigos de los chicos llegaron a separarlos, luego de que Emily los llamara.

- ¿¡Que rayos les pasa a los dos?!

- ¡ Dylan comenzó todo! -dijo Nicholas fulminándolo con la mirada-.

- ¡Eres novio de Emily! ¡Mi Emily! ¿¡Que esperabas?! -respondió Dylan molesto-.

- ¿Tú Emily? Yo jamás te pertenecí -respondió la chica seria-.

Dylan se quedo callado, ¿Que acababa de decir? Estaba armando una escena de celos cuando Emily únicamente era su amiga, o mejor dicho había sido su amiga. Parecía un ex novio celoso que no acepta que lo hayan terminado.

- Sólo vete Dylan, -dijo Nicholas- no empeores más todo, sólo haces sentir peor a Emily.

Dylan miró a Emily, ella lloraba. Dylan se acercó.

- Lo lamento....-susurró-, no te daré mas problemas ni interferiré más en tú vida.

Se dio la vuelta y caminó alejándose, la miró por ultima vez y se fue. ¿Qué más podía hacer? Sólo la lastimaba, ni siquiera tenía sus pensamientos claros. Nada estaba claro en él en éste momento.

Llegó a la universidad nuevamente y se acostó en aquella hamaca donde tantas veces se había acostado junto con Emily en su lugar secreto. Aún guardaba su aroma, el aspiro profundamente para guardarlo dentro de él.

Comenzaba a creer que lo mejor para Emily era que él se fuera lejos y eso iría. Al llegar a su casa hablo con su madre y le dijo lo que haría y sus razones, ella no se negó y lo abrazó despidiéndose.

Empacó sus cosas, encontró fotos viejas de cuando era niño, la mayoría de ellas era con Emily a su lado, los dos siempre tomados de la mano jugando a ser novios. Dylan río con melancolía y una lágrima rodó por su mejilla.

Le escribió una carta a Emily, fue y la dejó debajo de su puerta y se fue hacia el aeropuerto.

Emily seguía con Nicholas charlando, él iba a irse cuando vio el sobre, lo tomó y leyó el remitente.

- Deberías abrirla, quizás sea importante -sonrió tristemente y se la dio en las manos-.

- No quiero nada que venga de él.

- ¿Realmente estas segura de que no quieres nada que venga de él? Tan solo mira a tú hija Emily, Dylan te dio algo con lo que yo jamás podre competir ni haría el intento de hacerlo.

- ¿A que quieres llegar con eso?

- Sólo dijo que leas la carta, nunca sabrás que habrá querido decirte si no lo abres.

Emily abrió el sobre y sacó la carta para después comenzar a leerla.

Emily.... No sé por donde comenzar, pero ahora me doy cuenta de muchas cosas de las cuales ignoré.
Como por ejemplo tú belleza innata, dios, ¿Cómo lo haces? Sin usar una pisca de maquillaje eres perfecta, tu sonrisa, es simplemente perfecta.

Eres la perfección andando, fui un gran idiota contigo, no merecías que te tratará así, jamás podré remediar mi error contigo. Teníamos todo, mejor dicho, yo lo tenía todo contigo y lo cambie por algo pasajero con Hanna.
Luego de verte con Nicholas, él como el te tenía tan cerca, sus manos, tu y él abrazándose, besándose, no lo resistí. Fue una tortura para mí, estaba celoso, ¿Quién lo diría no? Siempre negué mis sentimientos o no quise aceptar lo que era obvio y todos sabían.