"No te juntes con ellos.."Eso es lo único que recuerdo de el sueño de la noche pasada, un chico moreno de ojos azules verdosos lo susurraba durante todo el sueño, creo que cada día me vuelvo mas loca.Me levante perezosamente de la cama y me fui hasta el baño. Tarde 15 minutos en ducharme y otros 10 en vestirme, no se porque tardaba tanto si solo me tenia que poner el uniforme del colegio. Termine de peinarme, me puse los zapatos y baje para desayunar. Cuando llegue abajo no me resulto nada raro que no hubiera nadie en casa, mis padres trabajan muchísimo y a veces no tienen tiempo ni para desayunar con su hija.
-Buenos días Rebeca.-Dijo mi hermana pequeña Carolina entrando a la cocina.
-Buenos días , ¿Qué tal has dormido?-Pregunte a mi hermana.
.-Bien.-Contesto ella. Mi hermana y yo vamos al mismo colegio, ella tiene 15 años, y yo 17,vamos juntas en el camino hacia el colegio, pero luego cuando entramos ella hace como que no me conoce de nada, es lo que mas odio de ella. Terminamos de desayunar en silencio, como siempre, y nos encaminamos hacia en colegio.
Bueno me presento, me llamo Rebeca, tengo 17 años, soy alta, con buen físico, con un pelo largo que me llega hasta la cintura marrón claro y ojos marrones.
Cuando llegamos mi hermana entro como si nada, sin despedirse de mi.
-Bueno días R.-Dijo Nerea, mi mejor amiga, ella era mas bajita que yo, pero mucho mas guapa, rubia de ojos verdes.
-Buenos días Nere.-La conteste, entre las dos nos llamamos R y Nere, luego a nuestro mejor amigo Javier le llamamos, Javier, el no es mucho de apodos, una vez le llamamos Javi y estuvo sin hablarnos una semana. Los tres somos mejores amigos desde la guardería.
A primera hora tocaba matemáticas, ya se lo que estáis pensando, que bien a primera hora matemáticas, salto de alegría, pero a mi me gustaban, no se porque nunca se me han dado bien las matemáticas. Cuando termino la clase, me fui hacia en gimnasio. En educa no hacíamos mucho, siempre el profesor nos daba la charla de que somos unos maleducados y que no vamos a llegar a mucho en esta vida. Por fin se acabo la clase de las charlas y nos fuimos hacia el edificio 5, donde se encuentran las aulas de física y química, esa era la única asignatura que se me daba bien.
Cuando entre en la clase me senté al lado de Javier, el era alto, moreno y de ojos azules. La profesora entro y nos dio los resultados del examen de la semana pasada. Cuando se acerco a mi , los nervios me invadieron, pero veía que tenia una sonrisa, lo cual era bueno, y si tenia razón, saque un 8.1, no me lo creo, me dio la enhorabuena, y continuo repartiendo los exámenes.
-Rebeca, me tienes que decir tu truco.-Me dijo Javier.
-Fácil, abres el libro y te pones a estudiar.-Le conteste y por su parte solo recibí un suspiro. El no estudiaba mucho, era el típico chico que cada fin de semana si iba de fiesta.
La clase termino, y nos fuimos a la cafetería, allí me compre un bocadillo de jamón y queso, y una coca-cola, Nerea se compro una manzana, y Javier unas galletas. Ninguno de los tres hablaba, muy raro de nosotros.
"Se comunica a todos los alumnos, que las clases a partir de las once que completamente suspendidas por motivos del centro. Gracias" Afirmo la directora.
-Oye y si nos vamos a comer al centro comercial?-Pregunto Nerea muy entusiasmada.
-Yo no puedo he quedado con alguien.-Dijo Javier después de mirar su móvil, se levanto y se fue.
-¿Que mosca le ha picado a este?-Pregunto a Nerea.
-No tengo ni idea.-Dijo Nerea de vuelta.-¿Comida de chicas?-Sugirió.
-Claro.-Asentí. Las dos fuimos a por las mochilas a las taquillas, y nos fuimos hacia el centro comercial, allí pasamos una agradable tarde de amigas, fuimos de compras y comimos en un restaurante chino. Cuando llegue a casa, estaba mi hermano mayor Daniel viendo la televisión. Mi hermano es alto, de un buen físico; va al gimnasio todos los días, y tiene el pelo castaño y los ojos marrones.
-¿Donde estabas? Te estaba esperando para comer.-Me dice mi hermano.
-He estado comiendo en el centro comercial con Nerea, lo siento por no haberte avisado, no teníamos colegio después del recreo y nos hemos ido directamente al centro comercial, ¿Ha llegado Carol?-Le pregunte a Daniel.
-Ella me aviso de que se iba a comer a casa de su amiga, no como otras.-Contesta.
-Que payaso eres.-Le digo dándole una pequeña colleja en le parte superior de la cabeza.-Subo a hacer los deberes.
Subo a mi habitación, y encuentro todo descolocado, no recuerdo haberlo dejado a si, pero con la cabeza que tengo no me extraña que se me haya olvidado. Cuando termino de hacer los deberes son las 6 de la tarde. Bajo a merendar algo, no tengo mucha hambre asique me cojo una manzana y subo de nuevo a mi habitación. Cojo el ordenador, y reviso mis redes sociales, nada nuevo. Me meto en el correo, y sin querer le doy a la cuenta de gmail de mi padre, me llama la atención un correo que recibió esta mañana de un tal, José Antonio García. Abro el correo y es de un abogado, al principio me asusto un poco porque mis padres ya llevan un tiempo discutiendo, pero por otro lado pienso que son asuntos del trabajo, lo dejo estar ahí, no me quiero meter en la vida de mi padre.
Son las 7 de la tarde y hace muy buen tiempo, asique me cambio de ropa y salgo a correr por el parque un rato. Cuando llego a casa ya son las 8:30, me ducho y me pongo a leer un libro que nos han mandado en clase. A las 9 llegan mis padres y mi hermana, y nos ponemos los cinco a cenar, es el único momento en el día que estamos todos juntos. A las 10 ya hemos terminado de cenar, subo a mi habitación y me pongo a ver alguna serie que hay por la tele, al final me quedo viendo Friends.
-¿Hija no crees que ya es hora de irte a dormir?-Me avisa mi madre entrando a la habitación.
-Es verdad mama no me había dado cuenta de que eran las 12, lo siento.-Me disculpo.
-No pasa nada hija, que descanses.-Dice dándome un beso de buenas noches. Termino de revisar todos los mensajes que tengo en el móvil y caigo profundamente dormida.
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Destiny
FanfictionHola mi nombre es Rebeca. Soy una chica normal de 17 años, pero todo cambia cuando mis padres se separan y me tengo que ir a vivir a Mullingar, un pequeño pueblo de Irlanda.