| CLARIVIDENCIA|
Hades Pov's
—A veces pienso que Morgan tiene razón cuando dice que eres un sabelotodo. Puedo decir que conoces este lugar como la palma de tu mano —dice el hombre mediterráneo a mi lado, su voz grave aparentando tranquilidad.
Ruedo los ojos ante su comentario, aunque no puedo evitar sentir una pizca de verdad en sus palabras. El eco de la risa de Morgan retumba en la oscuridad que nos rodea, resonando y causandome una ligera molestia que dejó ir rápidamente para no evitar el verdadero enfoque de porqué estamos aquí presentes.
—Él tocó el tema, pero debes admitir que es cierto —afirma, tratando de contener su risa.
El tiempo parece detenerse mientras observo el reloj en mi muñeca marcar exactamente las 3:33 am. En ese preciso instante, el reflejo del puente sobre el lago se distorsiona, creando un portal que se abre en un círculo perfecto, como una herida en la realidad misma, permitiéndonos vislumbrar la entrada al infierno.
Era igual de tétrico como lo recordaba..
El aire se vuelve pesado y denso mientras avanzamos con cautela. La atmósfera oscura y opresiva, tan característica de este lugar, envuelve todo a nuestro alrededor. Las sombras parecen cobrar vida, susurrando secretos inaudibles al oído, y el suelo bajo nuestros pies se siente demasiado frágil . El paisaje está impregnado de una oscuridad tan impredecible, donde incluso la luz parece morir, y el horizonte se desdibuja en una niebla eterna que oculta cualquier esperanza de retorno.
La energía negativa acumulada entre las almas pecadoras que rondaban el lugar se manifestaba en el aire, no podía evitar sentirme tenso. A nuestro alrededor, los llantos y las súplicas de los condenados se alzaban en un coro lúgubre, resonando en nuestras mentes. Cada paso que dábamos parecía ahogar esas voces, hasta que finalmente se desvanecían en un susurro distante.
Estar en el infierno no era como estar en un parque de diversiones, era todo lo contrario. Vives con la sensación de ser atacado en cualquier momento independientemente del rango que pertenecías.
—No se queden atrás... aún no me fío de este lugar —digo, sin apartar la vista del camino tortuoso frente a nosotros.
Serkan, lucía totalmente asombrado por los alrededores, creo que era su primera vez en esta zona.
Finalmente pasamos la entrada que se ha cerrado detrás de nosotros, dejándonos atrapados en este laberinto de sombras.
—Nunca terminaré por acostumbrarme a este lugar... nunca había entrado por este puente —admite Serkan, con un tono de incredulidad teñido de temor.
La pregunta inevitable no tarda en llegar, tan predecible como siempre.
—Debimos entrar por uno de Reino Unido. ¿Por qué tomar una ruta extranjera? —Morgan parece casi resignado, pero la tensión en su voz es palpable.
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OSCUROS | EN EDICIÓN |
Romance"Nadie es libre de pecado, sin pagar un duro precio" Portada hecha por : Victoria Bossetti