|PRIMER ENCUENTRO|
Ekaterina pov´s
El tiempo voló más rápido de lo que esperaba, y ya era sábado por la tarde. A solo unas horas de asistir a la tan esperada fiesta de disfraces, Tamara casi pegó un grito al cielo de la emoción cuando escuchó salir la palabra "fiesta" de mis labios, algo que nunca hubiera imaginado.
“¡Los milagros existen!” gritó felizmente, y todavía podía escuchar el eco de su voz retumbando en mi cabeza. Ni siquiera cuando logré obtener mi visado estudiantil la vi ponerse tan eufórica.
—Absolutamente no usaré eso... —dije con firmeza, rechazando de inmediato el disfraz que me extendía. Era un ángel blanco, y solo al verlo sentí que todo en mí gritaba que no.
—¿No tienes algo más... conservador? —pregunté, esperando por lo menos una alternativa.
—La palabra "conservador" no existe en mi guardarropa, Katya —respondió Tamara, lanzando el disfraz sobre la cama con un gesto despreocupado. El conjunto consistía en un corsé blanco, una minifalda, unas pequeñas alas y medias del mismo color. Demasiado revelador, demasiado... todo.
—Recuerda que soy... —Intenté justificarme, pero ni siquiera pude terminar la frase.
—Cristiana Ortodoxa Rusa, sí, sí, lo tengo más que presente —me interrumpió, completando la frase por mí. Noté cómo su mirada se suavizaba por un segundo, pero el disfraz seguía allí, desafiándome a aceptarlo.
—No seas aguafiestas, Ekaterimburgo... déjame ver si encuentro algo más —suspiró, girándose hacia su armario. Pude oír el sonido de perchas chocando mientras Tamara hurgaba en su inagotable colección de ropa.
—Tienes todo para brillar en esa fiesta, pero tu actitud no te ayuda —dijo finalmente, mientras exageraba sus movimientos, agitando los brazos dramáticamente.
—Será porque me parece extraña la invitación —insistí, sintiéndome cada vez más incómoda con la idea de asistir.
—¡Lo encontré! —me interrumpió abruptamente, sacando un vestido del armario. Sus ojos brillaban de emoción mientras lo desplegaba ante mí. —Oh, por Dios, vas a hacer que el mundo tiemble —dijo, elevando las cejas de manera juguetona.
| ••• |
Tan pronto como ingresamos a la fraternidad de los Norden, me quedé impresionada por el diseño interior; la influencia del estilo escandinavo era innegable.
—Wow, este lugar es increíble... Mira, Tamara... —Intenté expresar mi entusiasmo mientras trataba de agarrar su mano para mostrárselo—. Tamara...
La decepción fue inmediata cuando me di cuenta de que ya había desaparecido, apenas unos minutos después de entrar. Debería haber apostado 100 libras, porque claramente me equivoqué al pensar que se quedaría a mi lado.
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OSCUROS | EN EDICIÓN |
Romance"Nadie es libre de pecado, sin pagar un duro precio" Portada hecha por : Victoria Bossetti